Quién es Juli Vavilova, la influencer que acompañaba al creador de Telegram cuando fue arrestado

El reciente arresto de Pavel Durov, el fundador y CEO de Telegram, ha causado gran revuelo internacional durante estos días.

Conocido como el “Marck Zuckerberg ruso”, el multimillonario de 39 años fue detenido por las autoridades francesas el pasado fin de semana, a raíz de una investigación preliminar por delitos que incluyen tráfico de drogas y promoción de terrorismo.

Al momento de su detención, el creador de la famosa aplicación de mensajería encriptada no estaba completamente solo. Y es que en el avión lo acompañaba una joven llamada Juli Vavilova, quien ha estado en el centro de atención por el rol que había tenido para que se concretara esa intervención policial en la capital francesa.

Vavilova, de 24 años, es una influencer rusa que reside en Dubai. Su contenido de redes sociales se basa principalmente en viajes, aunque también aborda con frecuencia otras temáticas como videojuegos e inversión en criptomonedas. Es apasionada por los caballos y el ejercicio.

La joven cuenta con múltiples plataformas, entre ellas Instagram -donde acumula más de 20.000 seguidores-, TikTok, Youtube y Telegram. Según indican sus descripciones, además de hablar su lengua materna, también tiene conocimientos de otros tres idiomas: inglés, español y árabe.

En su faceta como streamer de Twitch, Vavilova se ha mostrado jugando distintos videojuegos mientras conversa sobre sobre criptomonedas y seguridad. También ha participado en podcasts donde ha hablado de crecimiento personal y su historia de vida.

Según se aprecia en sus últimas publicaciones, recientemente Vavilova hizo un viaje por Kazajistán y Kirguistán. También pasó por Azerbaiyán, donde visitó el Servicio de Seguridad Cibernética de ese país.

En ninguna de esas fotografías aparece el rostro del creador de Telegram. Sin embargo, las imágenes que él compartió en sus propias cuentas, incluyendo unas en las que aparece un cañón y un campo de tiro, sugieren que habrían estado juntos en ese viaje por Asia Central.

También han difundido registros que muestran a una mujer rubia, parecida físicamente a Vavilova, junto a Durov y otras personas en un restaurante de Bakú, la capital de Azerbaiyán.

De acuerdo a Daily Mail, se ha especulado que las imágenes que Vavilova publicó en Instagram habrían llevado a que las autoridades francesas rastrearan el avión privado de Durov en su llegada a Francia.

Debido a que la influencer estaba junto al creador de Telegram durante su arresto se ha mencionado que podrían ser pareja, lo que aún no ha sido confirmado por ellos. No obstante, según el sitio británico, la relación es conocida entre algunos círculos de Dubai.

La ciudad de los Emiratos Árabes Unidos también ha sido el lugar de residencia del magnate ruso en los últimos años, luego de que en 2014 abandonara su país natal tras presiones de Vladimir Putin para que cerrara páginas de políticos opositores en su plataforma VK.

La madre de la influencer, llamada Ekaterina, ha asegurado que no ha logrado comunicarse con su hija desde antes de que el avión llegó a Francia. Ni siquiera contesta el teléfono. “Recibimos todas las noticias de los medios de comunicación”, detalló la mujer a Komsomolskaya Pravda.

“Nuestros teléfonos no dejan de sonar, pero solo llaman los periodistas. Comprendan nuestra posición”, agregó la madre de Vavilova.

Durante el sábado 24 de agosto, poco después de que su jet privado llegara al aeropuerto Le Bourget, Durov fue detenido por la Gendarmería de Transportes Aéreos.

Antes de eso, se había emitido una orden de arresto contra el multimillonario en el marco de una investigación por varios delitos, como fraude, tráfico de drogas, crimen organizado, promoción del terrorismo, lavado de dinero y abuso sexual de niños.

De acuerdo a la Fiscalía francesa, Durov se convirtió en cómplice de esa serie de delitos porque no ha moderado contenidos que promueven el crimen y no ha colaborado con las autoridades que se encuentran investigando los ilícitos cometidos en ese espacio.

En 2013, Telegram fue lanzada por Durov y su hermano Nikolai como una aplicación de mensajería encriptada. Su propósito era ser una alternativa a WhatsApp.

La aplicación, cuya sede central se encuentra en Dubai, ha sido traducida a más de 20 idiomas y cuenta con más de 900 millones de usuarios en el mundo, lo que la ha convertido en una de las redes más usadas a nivel global junto a Facebook, Instagram, X (antes Twitter), Youtube y otras más.

Una de sus características más distintivas es la sincronización de su nube ilimitada, que permite que sus usuarios tengan acceso a sus mensajes desde distintos lugares, sin depender de un único dispositivo.

Telegram también se caracteriza por su compromiso con la libertad de expresión. Al tener conversaciones encriptadas, es poca la supervisión que la red social realiza en las publicaciones de los usuarios. Eso ha permitido que la plataforma sea muy usada por quienes viven en países con gobiernos autoritarios, pero también ha provocado que sea un espacio donde fácilmente se puede difundir contenido ilegal o dañino.

Luego de la detención de Durov, la compañía emitió un comunicado advirtiendo que Telegram “cumple con las leyes de la UE, incluida la Ley de Servicios Digitales” y que la moderación que realizan “está dentro de los estándares de la industria”.

“El CEO de Telegram, Pavel Durov, no tiene nada que ocultar y viaja con frecuencia por Europa. Es absurdo afirmar que una plataforma o su propietario son responsables del abuso de esa plataforma. Casi mil millones de usuarios en todo el mundo utilizan Telegram como medio de comunicación y como fuente de información vital”, agregaron en el mensaje.

El arresto ha provocado reacciones divididas en los últimos días. El presidente de Francia, Emmanuel Macron, aseguró que “la detención del presidente de Telegram en suelo francés se produjo en el marco de una investigación judicial en curso” y que no se trata de “decisión política. Son los jueces los que deben pronunciarse al respecto”.

Mientras que el CEO de X, Elon Musk, que también se ha mostrado a favor de no moderar demasiado el contenido de su red, sugirió que se debería liberar a Durov. “Estamos en 2030 en Europa y te están ejecutando por darle me gusta a un meme”, escribió.

Este miércoles, el multimillonario ruso fue liberado de la custodia policial en París y se le transfirió a la corte para ser interrogado, según reportó CNN.