Quién fue Coronel Tom Parker, el polémico manager que convirtió a Elvis Presley en un ícono musical
Apenas lo vio actuar en vivo, Coronel Tom Parker supo que Elvis Presley tenía un don único por su voz y desplante en el escenario. Le consiguió contratos discográficos, papeles en películas, espectáculos y programas en la televisión estadounidense, lo que terminó por convertirlo en una estrella inalcanzable. Pero su excesiva ambición y poca preocupación por el bienestar del rey del rock and roll, terminaron por pasarle la cuenta.
Podría decirse que el “Coronel” Tom Parker fue uno de los representantes que quedará recordado para siempre en la historia del rock and roll. Su comprensión de lo que era la industria musical para poder trasladar a un artista a la cúspide, fue una de sus mejores habilidades.
La razón es muy simple: fue él quien provocó el ascenso en la carrera de Elvis Presley.
Pero eso no surgió de la nada. Cada movimiento que hizo para hacer crecer la carrera del cantante estadounidense, fue fríamente calculado. Eso también terminaría pasándole la cuenta tanto a él como al llamado rey del rock and roll.
Las raíces del manager de Elvis Presley
El “Coronel”, cuyo nombre real fue Andreas Cornelis van Kuijk, nació el 26 de junio de 1909 en la ciudad de Breda, en Países Bajos. Desde temprana edad, trabajó para que el público acudiera al circo de la ciudad.
Pero eso no era suficiente para el joven Andreas, y cuando tenía 17 años, decidió aprovechar la embarcación marítima en la que trabajaba para viajar a Estados Unidos. Sin embargo, un par de meses después se vio obligado a volver a su país.
En Breda las cosas no iban cuesta arriba, puesto que la prosperidad económica se hacía muy difícil de conseguir. Siguiendo su instinto, volvió a emigrar a territorio estadounidense en 1929: allí se enroló rápidamente en el Ejército y adquirió el sobrenombre que llevaría por el resto de su vida, Coronel Tom Parker.
En aquel lugar intentó esconder lo máximo posible su origen neerlandés. Se esforzaba en imitar el tono sureño, hasta que finalmente lo logró y todos creyeron que era estadounidense.
Como fue expulsado del Ejército por su comportamiento, en 1931 volvió a trabajar en circos y espectáculos, un terreno que conocía muy bien desde sus primeros años de trabajo. Nuevamente, su rol era cautivar al público para que asistiera a los eventos.
Probablemente fue en esos años en que Coronel Tom Parker adquirió la habilidad de convencer a las personas y olfatear qué era lo que exactamente deseaban observar o consumir si de entretención se trataba.
Hasta que en 1938 comenzó su incipiente carrera en la industria musical. Ese año empezaría a trabajar con el cantante de country Gene Austin, también atrayendo público hacia sus shows.
Para la década de 1940 Coronel Tom Parker estaba consolidándose como manager musical, llegando a colaborar con artistas como Eddy Arnold y Minnie Pearl. Tenía que conseguirles contratos, espectáculos y publicidad en la radio. Y lo hizo muy bien: en esa época, el cantante Eddy Arnold gozaba de cierto éxito en la industria.
Ese sería apenas el comienzo, comparado a lo que el manager alcanzaría con Elvis Presley.
Llega Elvis a la vida de Coronel Tom Parker
Corría el año 1955 y Parker, junto al cantante Hank Snow -con quien había formado una sociedad- fueron testigos de unos de los shows de Elvis cuando estaba recién comenzando su carrera.
No podían creer el talento del artista originario de Tennessee. Elvis demostraba que tenía un don único, era un cantante prometedor en el género del rock and roll, que recién estaba adquiriendo una forma. Sin embargo, Elvis todavía no tenía el crecimiento que necesitaba en su carrera.
Ese mismo año Coronel Tom Parker hizo que Elvis, de entonces 20 años, lo contratara como su agente oficial. No pasaría mucho para que el representante consiguiera que la compañía discográfica RCA adquiriera los derechos de grabación de las canciones del intérprete por la suma de 40 mil dólares.
Ese contrato fue altamente publicitado. Como Hank Snow había levantado una sociedad con Parker, el primero le dijo que estaba contento con la llegada de Elvis a la empresa. Pero Parker, por su parte, fue enfático en aclararle que el compromiso era con el artista y no con él.
Ya con el contrato en mano con la discográfica RCA, Presley pudo grabar su primer tema en 1956: Heartbreak Hotel. De esa manera se germinaría la etapa de celebridad de Elvis Presley.
Cómo el agente influyó en la elevación de Elvis a ícono musical
Los movimientos que vinieron a continuación por parte de Parker fueron claves al momento de catapultar al cantante al estrellato. Pudo mejorar la posición de Elvis dentro de RCA y también alcanzó que firmara un contrato en la industria cinematográfica. Incluso, el representante se atrevió a rechazar la cláusula de exclusividad que exigía el sello discográfico.
Evidentemente, en el ascenso de Elvis ayudó su carisma inigualable ante el público y su desplante en el escenario que lo caracterizaba en esa etapa. Pero al mismo tiempo, la importancia que tuvo su manager en la construcción de la estrella musical es innegable.
En esto el poder de la televisión también cumplió un papel fundamental. La presencia de Elvis en la pantalla causó efectos que nunca antes se habían visto.
Parker consiguió que el intérprete de Love Me Tender se presentara en programas de televisión, como el de Milton Berle y en El show de Ed Sullivan, lo que provocó que miles de espectadores pudieran conocerlo. De hecho, en el segundo programa, el presentador Ed Sullivan había señalado que jamás llevaría a Presley a su estudio.
La aparición del artista de rock and roll en la televisión estadounidense no estuvo exenta de polémicas. Algunos quedaban impresionados por su desplante musical, pero otros veían con muy malos ojos los movimientos que realizaba al bailar en sus shows. Especialmente, el público más adulto. Aún así Presley pudo alcanzar fama en todo Estados Unidos.
La influencia de Parker sobre Elvis era tremenda en todo sentido. Llegó a tal punto que lo convenció de que era una buena idea enlistarse en el Ejército estadounidense, acción que el cantante hizo en 1958. Según su manager, esto podría ayudarlo a mejorar su imagen pública. Al mismo tiempo el representante lo persuadió de que no podía presentarse ni grabar fuera de Estados Unidos.
¿Por qué hacía todo eso? El crítico musical Jon Landau dejó entrever posibles razones en el documental Elvis Presley: El Rey del Rock & Roll, de HBO: “Parker no estaba interesado en que Elvis se convirtiera en alguien demasiado independiente. Necesitaba que Elvis creyera que todo lo bueno procedía de él y que todo lo malo venía de enemigos imaginarios. Mantuvo ese engaño durante mucho tiempo”.
Aunque Coronel Tom Parker había ayudado a fabricar la carrera de Presley, él creía que requería algo más que talento musical. A su juicio, había que elaborar una imagen determinada del artista. No fue cercano a él, no lo felicitaba por sus logros ni mucho menos le daba soporte emocional si es que él lo necesitaba. Mientras Elvis le diera grandes ganancias y el público lo quisiera, el resto no importaba.
Cuando Elvis estuvo en el Ejército, su representante jamás acudió a visitarlo. Aunque dio distintas excusas, una de las creencias es que Parker no podía ni quería salir de Estados Unidos.
La razón de lo anterior se remonta a cuando tenía 20 años y era la segunda vez que emigró desde Países Bajos hacia América. Esa salida no habría sido solo en búsqueda del sueño americano. Nunca fue confirmado, pero es posible que Parker se haya visto vinculado al homicidio de una mujer en su ciudad de origen, Breda, y debido a eso habría escapado a Estados Unidos al día siguiente del asesinato.
A pesar de que no visitó al propio artista que representaba, Coronel Tom Parker se encargó de preparar con bombos y platillos el regreso de Elvis desde el Ejército, lo que se concretó en 1960. Logró que Elvis tuviera su propio show de bienvenida en la cadena televisiva ABC, que también tuvo la presencia del cantante Frank Sinatra.
En los años posteriores, el manager persuadió a Elvis de que dejara las presentaciones en vivo para dedicarse más bien a las películas. También le hizo ver que era buena idea que se casara con Priscilla. Hasta que en el año 1968, Parker quiso que el artista presentara sus recitales en el casino de Las Vegas y éste le hizo caso.
Y es que el intérprete de Burning Love siempre pensó que su manager velaba por su bienestar, aunque no siempre fuera así. En el periodo de Las Vegas, Parker llegó a cobrar hasta el 50% de las ganancias del artista.
La caída de una estrella y su manager
Luego del regreso musical en Las Vegas, empezaría un lento y silencioso deterioro de la salud de Elvis. Las adicciones a los fármacos, las drogas, la decadencia de su voz, el sobrepeso y la desidia en el escenario, reflejaban que una estrella comenzaba a apagarse. Pero la ambición del agente era mayor e insistía en que el cantante se siguiera presentando en vivo, por más que éste no pudiera.
Hasta que en 1977, Presley falleció.
“Elvis no murió. Lo que no está es su cuerpo”, diría Coronel Tom Parker tras la ausencia del artista. Según su perspectiva, el provecho que podría sacar del rey del rock and roll continuaba por más que él no estuviera presente.
A partir de ahí brotó una lucha judicial entre la familia de Presley y el agente, ya que que éste último fue acusado de haber desperdiciado las ganancias que obtuvo Elvis en vida. En 1983, un acuerdo judicial permitió que Parker recibiera 2 millones de dólares si renunciaba a los derechos sobre las ganancias del artista.
Por varios años Coronel Tom Parker estuvo viviendo en una suite del hotel Hilton de Las Vegas, hasta que fue desalojado por posibles deudas. En el año 1994 decidió dejar de ser una figura pública, pues su salud no presentaba buenos augurios. Tres años más tarde, a los 87 años de edad, fallecería el manager del rey del rock and roll.
Comenta
Por favor, inicia sesión en La Tercera para acceder a los comentarios.