¿Se puede tomar paracetamol e ibuprofeno al mismo tiempo?

Ya sea por un dolor de muelas o en las articulaciones, una lesión o un malestar menstrual, el uso de remedios es usual para muchas personas alrededor del mundo.

Entre ellos, el ibuprofeno y el paracetamol suelen ser de los más comunes que se encuentran en el botiquín de primeros auxilios que es recomendable tener en todos los hogares.

Pero, ¿cuándo la necesidad de tomar estos medicamentos puede convertirse en un peligro? ¿Se pueden usar juntos? ¿Tienen eventuales efectos secundarios?

Los riesgos dependen de cada paciente y del estado de salud que tienen, aunque el Servicio Nacional de Salud de Reino Unido (NHS) detalló algunas claves que podrían ser de utilidad para aliviar un malestar sin sufrir consecuencias graves para el organismo.

A pesar de que ambos suelen ser utilizados con los mismos objetivos, estos son distintos y actúan de manera diferente al momento de tratar un dolor.

Una de las principales diferencias, es que el ibuprofeno tiene efectos antiinflamatorios, mientras que no así el paracetamol.

Algunos de los diagnósticos para los que es ocupado el primero, son la artritis, los dolores menstruales, distintas lesiones y el malestar de espaldas o de muelas, entre otros.

En este sentido, informaciones reunidas por The Sun explicaron que nunca debe tomarse con el estómago vacío, ya que puede irritar el organismo y desatar consecuencias como hemorragias o úlceras.

Tanto ese como el paracetamol pueden consumirse en conjunto, repartidos en dosis de cada cuatro horas con dos horas de diferencia.

Y si bien, desde el NHS destacaron que su uso controlado con el apoyo de un médico es seguro para la mayoría de las personas de 16 años o más, podría provocar graves consecuencias en los menores de esa edad.

Los doctores de la organización británica dijeron que el uso de ibuprofeno no es adecuado para las personas que han tenido una reacción alérgica a este remedio en el pasado, a quienes han presentado síntomas alérgicos —como secreción nasal, sibilancias o reacciones cutáneas— a medicamentos como la aspirina, a los pacientes que tienen una hipertensión arterial no controlada, a las embarazadas y a las mujeres que están en plan de estarlo.

Asimismo, antes de consumirlo es necesario informar al médico si se han enfrentado problemas cardíacos, insuficiencia renal, enfermedad de Crohn, colitis ulcerosa, varicela, herpes zóster, problemas de hígado o complicaciones que aumenten el riesgo de hemorragias o úlceras en el estómago, entre otras dificultades.

De la misma manera, los mayores de 65 años deben tener especial cuidado, ya que según los especialistas corren más riesgos de sufrir de este último padecimiento, sobre todo si padecen de una enfermedad crónica.

Efectos secundarios del uso excesivo de ibuprofeno son: la sensación de estar enfermo, dolor de estómago, cansancio, heces negras, vómito con sangre (una señal de hemorragia estomacal), zumbidos en los oídos, dificultades para respirar y cambios en la frecuencia cardiaca.

Y pese a que no es común que aparezcan consecuencias adversas tras la ingesta de paracetamol en dosis adecuadas, algunas de estas podrían ser una erupción alérgica, taquicardia, hipotensión, enrojecimiento y trastornos sanguíneos, además de daños hepáticos y renales si se cae en una sobredosis.

Si se presenta alguno de los síntomas descritos, es importante que visites a un doctor lo antes posible para evaluar tu estado de salud.

La dosis común de paracetamol para los adultos es de una o dos pastillas de 500mg hasta cuatro veces en 24 horas, periodo en el que deben pasar cuatro horas entre cada ingesta.

Para el ibuprofeno en adultos, se tiende a sugerir la misma cantidad de comprimidos, aunque de 200mg, tres veces al día, los cuales deben tomarse cada seis horas.

Desde el NHS aseguraron que este último medicamento no debe usarse por más de 10 días, salvo que un médico especialista lo haya recomendado para tratar ciertos diagnósticos de larga duración, tales como artritis reumatoide. En esos casos, es probable que también recete otros remedios para proteger el estómago.

Cabe destacar que siempre es recomendable visitar a un médico en caso de cualquier malestar relacionado a estos medicamentos, mientras que si consumiste más de las dosis permitidas, puedes ir a urgencias idealmente con la compañía de alguien más y llevando —si es que tienes a mano— una muestra de lo que tomaste y su caja.