Tengo cáncer de colon en etapa 4 y estos son los 6 síntomas que desearía no haber ignorado

Cada vez hay más casos de personas jóvenes que están siendo diagnosticadas con cáncer colorrectal. Esta enfermedad solía aparecer solo en adultos mayores, sin embargo, un estudio que utilizó datos de la Organización Mundial de la Salud y la Agencia Internacional de Investigación sobre el Cáncer destapó un alarmante panorama.

Este cáncer, que sucede en el intestino grueso y el recto, está afectando a personas menores de 50 años y, en especial, en menores de 30, según el estudio publicado en The Lancet Oncology.

Los investigadores todavía no saben por qué, no obstante, están intentando descubrir qué fue lo que cambió en la actualidad para favorecer esta preocupante alza.

Y es que su aparición en personas jóvenes está aumentando en países no solo occidentales (como se creía en un inicio), sino también en Latinoamérica, el Caribe, Asia y Europa del Este.

Entre los afectados por la enfermedad está Joe Faratzis, un joven de 28 años que recibió el diagnóstico de cáncer de colon en etapa 4, es decir, cuando ya se había propagado más allá del lugar donde se originó.

En sus redes sociales, decidió contar cuáles fueron los síntomas que se arrepiente de haber ignorado.

Era 2019 y Joe Faratzis tenía 28 años. Un día, comenzó a sentir una pequeña molestia en la parte baja de su abdomen, pero era tan débil que fue “fácil de ignorar y olvidarme de ella”.

Cuando fue al doctor, le preguntaron por sus hábitos alimenticios y cada cuanto ocupaba el baño. También le escribieron una orden médica para hacerse exámenes preventivos, como una ecografía y colonoscopía.

Pero el joven pensó que “no era necesario”, y no los realizó. “Aplacé estos síntomas durante meses, antes de finalmente hacerme una colonoscopía”, contó en su cuenta de TikTok.

Aunque vivió tranquilo por varios meses más, hubo un síntoma repentino que lo asustó. Era de noche y estaba en casa cuando soltó un gas. “Mire hacia abajo y vi sangre. Fui al baño y había aproximadamente media taza de sangre en el inodoro”.

“No me dolió, pero pensé ‘demonios, obviamente hay un problema aquí’”.

Además de lo anterior, los síntomas que Faratzis ignoró por mucho tiempo, pero que eran señales de que tenía cáncer de colon fueron:

1. Sangre en las heces.
2. Sudoración nocturna.
3. Dolor abdominal en el lado inferior derecho.
4. Necesidad frecuente de ir al baño.
5. Estreñimiento.
6. Calambres al agacharse.

La presencia de sangre fue lo que asustó y motivó al joven a buscar ayuda médica.

Después de que le llegaran los resultados del examen decisivo, comenzó su arrepentimiento: el diagnóstico fue cáncer colorrectal en etapa 4, que requeriría un tratamiento largo e intenso para intentar recuperarse.

Cinco años después de haber sido diagnosticado, Joe Faratzis decidió relatar su historia para ayudar a otras personas y, en especial, jóvenes que, como él, podrían estar ignorando las señales de que algo no anda bien en el colon.

“Si me hubiera hecho la tomografía computarizada en 2019, cuando tuve los primeros síntomas de cáncer colorrectal, es posible que no hubiera terminado en la situación en la que estoy ahora”.

El joven comenzó a hacer quimioterapia oral e intravenosa, y también tuvo que someterse a una cirugía para extraer la porción de su colon que fue más afectada.

Contra todo pronóstico, logró vencer la enfermedad, aunque reveló que debe estar atento a los síntomas que podrían indicar que volvió. Por esto, decidió contar su historia con el resto del mundo para salvar vidas.

Su mensaje principal es tomar cartas en el asunto en cuanto se pueda, pues la detección temprana puede cambiar el rumbo del tratamiento y los pronósticos de forma relevante.

“No arriesgue su vida esperando para ver a un médico. La detección temprana podría salvarte a ti y a tu familia”, dijo.

Según explican de la prestigiosa clínica estadounidense Mayo Clinic, el cáncer de colon sucede cuando existe una proliferación de células en una parte del intestino grueso.

Usualmente comienza cuando se forman grupos pequeños de células, llamados pólipos. Estos son benignos, pero algunos pueden convertirse en cáncer con el tiempo.

Lo complejo es que esta primera instancia no provoca ningún síntoma, por lo que es importante hacerse exámenes, en especial cuando hay antecedentes familiares de la enfermedad.

En esta línea, según el mismo centro médico, los factores de riesgo para desarrollar cáncer de colon son:

• Presencia de pólipos. Si una persona tiene pólipos, aumenta el riesgo de que se conviertan en cancerígenos.
• Enfermedades inflamatorias del intestino. Algunos ejemplos de ellas son la colitis ulcerosa o la enfermedad de Crohn. Dado que causan dolor e inflamación, pueden aumentar el riesgo de padecer cáncer de colon.
• Antecedentes familiares. En línea con lo anterior, tener familiares que tuvieron cáncer de colon también aumenta las posibilidades de padecerlo.
• Dieta baja en fibra y alta en grasas. Según los estudios, el cáncer de colon y de recto suelen estar relacionados con una alimentación deficiente en fibra, pero que tiene muchas grasas y calorías. Por ejemplo, las personas que comen mucha carne roja y procesada tienen más riesgos.
• Vida sedentaria. Las personas que no tienen actividad física suelen ser más propensas a desarrollar esta y otros tipos de enfermedades.
• Diabetes.
• Obesidad.
• Fumar.
• Tomar alcohol.