Cuando hablamos de reciclaje, nos referimos a un proceso a través del cual un residuo -que podría considerarse solo como basura- se transforma en un nuevo material. En el Upcycling se aprovechan los desechos u objetos en desuso para crear nuevos productos por medio de la creatividad, dándoles un mayor valor. Algunos ejemplos son los pallets convertidos en increíbles muebles para la casa, retazos de telas en trapillos para tejer, o vinilos para crear un estiloso reloj para la pared. Inspirados por la contaminación que afecta a Isla Mocha, en la Región del Bíobío, Daniela Larrea, Sara Pinochet y Nicolás Valdivieso crearon “Sustentabla", un emprendimiento que busca construir tablas de surf a partir de los plásticos que encuentran en el mar. Y de esta forma, colaborar para hacer frente a los cerca de 13 millones de toneladas de plásticos que se arrojan cada año a los océanos, los que quedan flotando o se transforman en microplásticos, impactando a las especies marinas.
Sustentabla "nace de la impotencia de ver nuestras costas contaminadas. Además con las corrientes oceánicas llegan residuos de muy lejos".
Daniela Larrea explica que Sustentabla “nace de la impotencia de ver nuestras costas contaminadas. Además con las corrientes oceánicas llegan residuos de muy lejos”. El proceso para convertir los plásticos en tablas es una alianza con distintas empresas, “una vez que recogemos la basura de las playas, la separamos y el polietileno lo traemos a Santiago donde lo peletizamos, lo pulverizamos, lo moldeamos hasta obtener la tabla de surf". [caption id="attachment_847471" align="aligncenter" width="300"]
Clases de Surf en Sustentabla / Fotografía de sustentabla.com[/caption] "La idea es hacer muchos tipos de tablas en distintos formatos para hacer deporte al aire libre y conectar a las personas con la naturaleza”, dice. En diciembre harán el lanzamiento oficial y desde ya se venden los modelos en www.sustentabla.com.
Arte sustentable
Otro ejemplo es el arte de Peter Guerrero, quien utiliza como materia prima los neumáticos en desuso para hacer bellas esculturas de animales y aliens. Este informático, en 2012, comenzó a cambiar los análisis de sistemas por el upcycling, dándole vida a un desecho que supera las 130 mil toneladas al año en Chile y ocupa gran parte de vertederos y rellenos sanitarios. [caption id="attachment_847448" align="aligncenter" width="300"]
Exposición "Arte Neumático" / Fotografía publicada en la web del Centro Cultural de Providencia.[/caption] “Para hacer las esculturas desarrollé dos técnicas. Una es una base metálica como esqueleto para ir atornillando el neumático y la otra es una técnica para hacer cuadros con neumáticos de bicicleta. Enseño esto en talleres para estudiantes de enseñanza básica en diversa escuelas de Santiago. Hace poco hice una pirámide para la comuna Los Nogales en Estación Central que ocupan gran cantidad de neumáticos, ayudando así al medioambiente”, cuenta.
Peter recorre distintas vulcanizaciones para obtener los neumáticos y su próximo proyecto es hacer animales en peligro de extinción para crear conciencia de la importancia de su conservación.
Peter recorre distintas vulcanizaciones para obtener los neumáticos y su próximo proyecto es hacer animales en peligro de extinción para crear conciencia de la importancia de su conservación. Sus obras se pueden ver en Instagram en la cuenta @peter_escultor.
De bolsas a joyas
En 2012 comenzó la historia de Joya Plástica, un emprendimiento familiar creado por la artista plástica Pía Calderón y sus tres hijas Constanza, Macarena y María Pía Álvarez. Este consiste en crear aros de autor hechos de plástico con plata y oro. Comenzaron con la idea de romper el mito de que las cosas recicladas son de mala calidad, y demostrar que un producto a base de bolsas de plástico puede ser también un objeto de deseo.
"Obtenemos los materiales de bolsas y envoltorios plásticos de productos. Lo que hacemos es cortarlos y hacerlos varillas que generan mostacillas que son la base para hacer los aros".
“Obtenemos los materiales de bolsas y envoltorios plásticos de productos. Lo que hacemos es cortarlos y hacerlos varillas que generan mostacillas que son la base para hacer los aros. Luego se prensan con calor y se van haciendo diversos modelos. Aprovechamos el color y la gráfica de las bolsas”, cuenta Constanza. Y agrega, “nuestra historia nace desde la herencia familiar con las enseñanzas de nuestra bisabuela, la “Oma”. En los años 80, ya exploraba sobre las diversas formas de reutilizar el desecho. Hacía ovillos y a través del tejido y el crochet con bolsas plásticas creaba canastos y los regalaba en los hospitales para que los enfermos guardaran sus remedios”. Las colecciones las venden en www.joyaplastica.com.