La prensa europea da como un hecho que la insólita suspensión que sufre Marcelo Bielsa en el Lille no es más que el paso previo a la salida del técnico del cuadro francés. Enredado en varias polémicas en la interna del club, al argentino no le fue bien en su segunda etapa en el fútbol galo. Igual el prestigio del estratega en Europa no se ha visto mermado: en las crónicas sobre su presente en Lille, los elogios abundan por sobre las críticas a su temperamento.
Bielsa, en cosa de días, quedará libre y con la opción de afrontar nuevos desafíos si es que le ofrecen algo atractivo. Uno asume que en la ANFP estarán al tanto de la actualidad del rosarino, por lo que el plan para ir por sus servicios ya debería estar en marcha. Si la idea es mandarle mensajes por la prensa partimos mal. Si hay algo que Bielsa detesta es el conventilleo mediático. Al DT le gustan las cosas cara a cara y es perentorio que en Quilín preparen una oferta seria, atractiva y convincente para traer de vuelta al entrenador que comenzó a sacarle rendimiento y cambiarle la cara a la selección chilena.
¿Tendrá algún interés real de volver a la Roja Marcelo Bielsa? Seguro que sí en caso que sean los afectos lo que determinen los movimientos del técnico. La reciente partida del PF Luis Bonini no hizo más que reverdecer el romance que siempre existió entre el medio futbolístico criollo y el cuerpo técnico argentino. Ahora la pega la debe hacer la dirigencia, demostrando competencia al momento de los convencimientos y creatividad cuando se trate de conseguir los recursos para una inversión millonaria.
Con Manuel Pellegrini, otro candidato atractivo para el puesto, se fracasó en el intento, a pesar de la cercanía con Arturo Salah. En la interna de la ANFP afirman que las arcas no son abundantes para ir a buscar un DT de renombre internacional, pero ahí debe aparecer la capacidad para generar los recursos y demostrar que el fútbol chileno se puede gestionar de manera profesional más allá del botín del CDF.
La pelota hoy la tiene la ANFP. Cuando llegó Pizzi primó el apuro porque estaban las clasificatorias encima tras la salida de Sampaoli. Hoy sí hay margen de tiempo, pero no de error. La elección del nuevo entrenador debe ser la correcta y Bielsa, sin duda, es una posibilidad extraordinaria.