HACE CUATRO meses comenzó la canallesca campaña contra el ex presidente Piñera. Con un claro objetivo político: enlodar y tratar de desprestigiar a la figura con mejores opciones en la carrera a La Moneda, con acusaciones falsas y sin fundamento, que intentaban poner en duda su rol como Jefe de Estado en el litigio ante La Haya contra Perú. Con desesperación, el PC -que lidera esta campaña sucia- y amplios sectores de la NM -que la apoyan a coro- ven que no ha tenido resultado.
Tras cuatro meses de una exhaustiva investigación, el fiscal que lleva la causa, Manuel Guerra, señaló que no existe ningún antecedente que dé cuenta de la intervención del ex presidente en la compra de acciones de Exalmar y que no se facilitó información privilegiada del litigio de La Haya. En dicha operación, como hemos señalado, no existe ningún situación ilícita, vicio o irregularidad. Más claro echarle agua.
Como esto falló, otra mentira. Le tocó a un proyecto minero en que participó su familia, íntegramente vendido en 2010. Se inventa que la termoeléctrica Barrancones fue detenida, no por razones medio ambientales, sino que para beneficiar a ese proyecto minero ubicado en la misma zona. ¡Es exactamente al revés! Qué mejor para una minera que tener energía y puerto cercano. Mentir y mentir sin Dios ni Ley. Canallesco.
El diputado PC Hugo Gutiérrez, con sus abogados-asesores parlamentarios pagados por todos los chilenos, presentó una nueva querella "copy paste" de un artículo de prensa. No describe siquiera hechos ílicitos, ni menos quiénes y cómo habrían participado. El "modus operandi" ya está establecido: lleva más de 21 querellas con objetivos políticos y los tribunales de justicia, llamados legalmente a evitar abusos de poder y usos políticos, tienen jueces de garantía que, por razones ideológicas o porque no resisten los "troleos" de redes sociales cuando actúan contra la izquierda, terminan facilitando estos abusos. Se "lavan las manos" y declaran admisible la querella. Allá verán los fiscales qué hacen.
Atacar al ex mandatario es la única vía que ve hoy la NM para intentar seguir en el poder. Es la angustia de los sectores que no conocen la palabra trabajo e intentan vivir de las prebendas del Estado. La campaña que viene será un intento permanente de desprestigiar a Piñera, porque ven con terror perder el poder y necesitan evadir los temas de fondo: crecimiento, empleo, salud, educación, seguridad o pensiones. En ellos sólo pueden exhibir fracasos.
Pero el PC y la NM se equivocan. Si creen que con estos ataques van a amedrentar a Piñera, no "saben con la chichita que se están curando". Cómo él dijo, esto sólo fortalece su compromiso con los chilenos y el servicio público, y lo motivan a seguir trabajando. La gente lo sabe, mientan lo que mientan, el país necesita con urgencia un buen gobierno y Piñera es el único que lo garantiza.
A todo esto se agrega la preocupación creciente del oficialismo, que ve que en los sondeos su carta más competitiva, Guillier, se va estancando. Un candidato que además incomoda a su coalición, que lo ve guardar silencio, ausente o responder con frases de buena crianza ante temas fundamentales. Primero, los incendios forestales, luego la prohibición de ingreso a Cuba de la ex ministra DC Mariana Aylwin. Habrá que esperar que vuelva de China para conocer sus posturas. ¿O quizás siga igual, haciéndose el chino?