Un saludo de 1948 da cuenta de cómo la poeta ganadora de Nobel festejaba la Nochebuena como cualquier otro mortal, en las zonas rurales de México, donde vivió por unos años. Su poderosa fe y su espíritu americanista la llevó eso sí a hacer importantes críticas a las contradicciones de la fecha.
24 dic 2024 06:00 AM