Embajadores: El "no" del director de El Mercurio y el destino de los cercanos a Piñera
La ex senadora Lily Pérez quedó fuera de la nómina.
"En las próximas horas se anunciarán los nuevos embajadores", comentó ayer el canciller Roberto Ampuero durante un contacto telefónico con radio Cooperativa desde Lima, donde asiste a la Cumbre de las Américas. Aunque dejó en claro que aún estaban a la espera de los "agreement" o beneplácitos de los respectivos países a los nombres propuestos por el gobierno, la autoridad precisó que los nombres ya estaban definidos.
La designación de los embajadores políticos y las redestinaciones de los funcionarios de carrera del servicio exterior tardó un poco más de lo habitual, lo que provocó tensión e incertidumbre en los partidos de Chile Vamos. La demora se debió en gran medida a los alegatos en la Corte Internacional de La Haya, por el litigio presentado por Bolivia para obligar a negociar una salida soberana al mar y que tuvieron lugar entre el 19 y el 28 de marzo. Esto obligó al canciller y al subsecretario de la cartera, Alfonso Silva, a dar prioridad a la defensa de Chile en el tribunal de las Naciones Unidas.
El martes pasado, Ampuero se reunió con el Presidente Sebastián Piñera en La Moneda para preparar la participación de la delegación chilena en la cumbre en Lima, ocasión en la que aprovecharon de cortar los últimos nombres de los próximos embajadores políticos.
En la cita quedó en claro que el Presidente Piñera no podría cumplir una de las metas que había pedido a las nuevas autoridades de la cancillería: bajar el número de los embajadores políticos a 18 para así cumplir con la cuota de 80 de carrera y 20 políticos de su primera administración, y satisfacer con ello las exigencias de una mayor profesionalización del servicio exterior chileno. Una demanda no sólo de los funcionarios diplomáticos de carrera, también de expertos y analistas internacionales. Durante el gobierno pasado, Bachelet designó a 25 embajadores políticos, 24 de los cuales cumplían misión en el extranjero. De estos, 22 presentaron su renuncia antes del cambio de gobierno y abandonaron las embajadas antes del 10 de marzo. El único que permanece en su cargo, es el ex ministro de Defensa y militante del PPD, José Goñi, a quien se le mantuvo en Suiza por razones humanitarias, a la espera de que finalice un delicado tratamiento médico.
Fuentes de Cancillería aseguran que se hizo un esfuerzo por reducir el número de embajadores políticos para acercarse a la meta, pero que hubo una fuerte presión de los partidos de Chile Vamos para que se tomaran en cuenta sus propuestas de nombres. En total, los partidos oficialistas entregaron a la Cancillería listas con más de 27 nombres de ex parlamentarios y dirigentes a los que se sumaban nombres de cercanos al Presidente Piñera.
Pero la demora también tuvo que ver con los ajustes que debió realizar el canciller Ampuero en los últimos días tras recibir la negativa de algunos personeros a los cargos que se le habían designado. Entre los que dijeron que no a una embajada se encuentra el director de El Mercurio, Cristián Zegers. Según altas fuentes de gobierno, al abogado y director de medio se le ofreció representar a Chile en España, una de las misiones diplomáticas más importantes de Chile en Europa.
Esta no sería la primera vez que Zegers declina asumir como embajador político de Piñera. En la administración anterior, recuerdan fuentes del servicio exterior, el canciller Moreno le ofreció asumir en Argentina, lo que fue rechazado por el entonces director de El Mercurio. En su remplazo, Piñera nombró al dirigente de RN Miguel Otero, quien debió abandonar la embajada en Buenos Aires a los pocos meses tras una polémica entrevista.
Ahora a España, tras la negativa de Zegers, Piñera decidió enviar a uno de sus cercanos: el economista y miembro del Consejo ejecutivo del CEP David Gallagher. Pese a que el nombre de Gallagher era mencionado también para el Reino Unido, en cancillería optaron por España, país que conoce bien, pues vivió allá varios años.
A Londres, Piñera envió como embajador político a otro de sus cercanos: el empresario Pedro Pablo Díaz, padre de la jefa de gabinete del mandatario, Magdalena Díaz. En la administración anterior de Piñera, ya se desempeñó como embajador en Australia.
Otros ajustes que se debieron hacer fueron las destinaciones en Washington y Argentina, luego que el abogado y cercano a Piñera Jorge Carey desechara asumir como embajador en Estados Unidos. Lo mismo hizo el ex ministro de justicia de Piñera Teodoro Ribera, a quien le ofrecieron la misión de Chile en Buenos Aires.
Fuentes de La Moneda afirmaron, además, que junto a la Cancillería se hizo una evaluación de los nombres propuestos por los partidos y las destinaciones que pretendían las colectividades, por lo que no fueron acogidas todas. Una de las principales damnificadas fue la ex senadora de Amplitud, Lily Pérez, quien esperaba asumir como embajadora en Argentina. Según las mismas fuentes, el gobierno optó por no designarla en ninguna embajada.
RN había enviado al gobierno una lista de 10 nombres, entre ellos el del ex senador Sergio Romero, quien asumirá en la Santa Sede; del ex embajador Octavio Errázuriz, quien asumirá en Japón, el ex diputado Germán Becker, quien perdió en la última senatorial y ahora asumirá la embajada de Chile en Panamá.
Otros nombramientos que ya están resueltos, afirman en la Cancillería, son los del ex embajador Renato Sepúlveda en El Salvador y Luis Schmidt en China. Entre los embajadores de carrera que serán redestinados se encuentra Milenko Skonic, ex director de política general de la Cancillería, quien asumirá ahora en la misión de Chile en la ONU.
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