Junta DC valida a Rincón y Goic anuncia que evaluará su candidatura

"¡Ganamos!, ¡Rincón diputado!". Un grupo de militantes bajó corriendo las escaleras del segundo piso de la sede de la DC y la noticia se extendió como reguero de pólvora: la opción de aprobar en bloque las candidaturas a senadores, diputados y cores se había impuesto entre los delegados de la junta nacional de la DC.

Aunque no había resultados oficiales, un grupo de adherentes del diputado por Rancagua hizo un conteo rápido de las 20 mesas en las que votaron los 587 delegados presentes en la máxima instancia DC. Votar en bloque por las candidaturas significaba validar la opción de Rincón de repostularse a la Cámara de Diputados, lo que se convertía de inmediato en un golpe difícil de esquivar para la candidata presidencial de la DC, Carolina Goic.

La senadora por Magallanes resintió el empellón. Tras conocerse los resultados preliminares convocó personalmente a una reunión extraordinaria de mesa en el segundo piso del vetusto edificio que alberga a la DC, mientras afuera Rincón celebraba con una veintena de simpatizantes: "¡Rincón, Rincón, Rincón hay uno solo, jamás te dejaremos, futuro senador!", gritaban y saltaban.

Apenas se produjo esta escena las caras largas se extendieron entre los cercanos a la abanderada DC: la decisión la arrinconaba contra su propia decisión de jugar su capital político para evitar que el hermano de la ex ministra Ximena Rincón lograra su repostulación. Una denuncia de 2002 por violencia intrafamiliar fue el detonante del debate político de la junta y de los días previos, donde la senadora insistió una y otra vez en que el partido debía decidir en favor de la ética y la transparencia, y por último, en favor de las mujeres. Así lo planteó en su discurso de apertura del cónclave que por primera vez en mucho tiempo, se desarrolló en un abandonado teatro ubicado al fondo de la sede de la DC, refaccionado para la ocasión y que este sábado estuvo a tablero vuelto durante todo el día.

Sin mencionar el caso específico del diputado, Goic habló fuerte y claro.

"Camaradas, no son tiempos para medias tintas, estos tiempos nos exigen rectitud en nuestro accionar, coherencia entre lo que decimos y lo que hacemos, valentía para muchas veces tomar decisiones que pueden ser difíciles, pero que son las que corresponden", dijo antes de insistir con vehemencia: "en la vida se pueden cometer errores, por cierto, todos somos humanos y tenemos la certeza de que no somos perfectos. Pero hay una condición básica a la que nos obliga nuestro pensamiento cristiano. Debemos ser capaces de pedir perdón y reparar. Si Camaradas, perdón y reparos para no volver a cometer esos errores… eso es lo que nos diferencia de la derecha piñerista y pinochetista, nosotros no podemos caer en los tecnicismos legales para interpretar lo correcto".

Las palabras de la senadora estuvieron precedidas de fuertes aplausos, mientras el diputado Rincón observaba inmutable desde la tercera fila. La ex ministra y candidata al senado por la Región del Maule, su hermana, escuchaba en silencio desde las tribunas del final del amplio salón.

Después del discurso inaugural vino el almuerzo y cerca de las tres de la tarde el debate político fue enconado y el caldeado y la temperatura comenzó a subir a medida que avanzaba la tarde. Si bien el debate lo abrió el experto electoral del partido, Víctor Maldonado, quien detalló la propuesta del consejo nacional - que en realidad era la orden del día- de aprobar un pacto parlamentario con la IC y el MAS, al no haber fructificado las negociaciones con el resto de los partidos de la Nueva Mayoría, el caso Rincón se impuso en gran parte de las alocuciones. Aquí destacaron las del propio Rincón y el de la ex ministra del trabajo, quien grabó la intervención de su hermano con su celular.

"La base de la ética es la verdad", se quejó el diputado por Rancagua, aludiendo a su inocencia y que los tribunales no pudieron acreditar las acusaciones en su contra y que su situación había sido un duro golpe para su vida familiar de más de 15 años.

"Hace mucho tiempo que no veía tanto odio, revancha y persecución como la que he visto en este tiempo", replicó más tarde Ximena Rincón.

Tras la reunión de mesa extraordinaria, Goic salió a hablar antes de retirarse de la DC: "fue un golpe muy duro, no era lo que esperaba. Me voy a tomar unos días para evaluar mi candidatura", dijo afectada la senadora por Magallanes. En la DC dicen que la abanderada quería renunciar anoche, pero varios la habrían convencido de que no era el momento.

Aunque el caso Rincón monopolizó el debate de la junta y está afectando el desenlace de la candidatura presidencial de la DC, la discusión de fondo y por la que se había citado la instancia era la ratificación del pacto parlamentario.

Durante toda la semana la dirigencia del partido, específicamente el primer vicepresidente, Matías Walker, y el secretario nacional, Gonzalo Duarte, sostuvieron intensas y ajetreadas tratativas con sus aliados de bloque para intentar conseguir un acuerdo parlamentario de última hora.

"Primó la voluntad de cuatro partidos de excluirnos" fue la explicación que le dio a la junta el diputado Walker, dando cuenta de lo infructuoso de las conversaciones y de la imposibilidad de que la DC pacte con sus socios históricos, léase el PS, PPD, o el PR, con cuyo partido también se hicieron gestiones de última hora. En dicho escenario, la DC incluso exploró opciones fuera de la Nueva Mayoría con Ciudadanos e incluso el PRO, sin resultado. Bajo dicho escenario el viernes el consejo nacional del partido resolvió proponer a la junta un acuerdo con la Izquierda Ciudadana y el MAS, partido del que fue expulsado Alejandro Navarro.

Apenas Walker mencionó esta opción, el grueso de los delegados lanzaron pifias y abucheos.

"¡Quiero decirles que son los únicos que quieren pactar con nosotros. El MAS ya no es el partido de Navarro y no apoyan la dictadura de Venezuela!", dijo el vicepresidente antes de explicar la razón de la propuesta: "Si no pactamos con otro partido no podemos llevar independientes, camaradas", cerró el diputado por Coquimbo. "¡Pero sin son chavistas!", gritaba un grupo de delegados.

Durante el debate político enfocado en el tema parlamentario, la mayoría de los delegados recalcaron una realidad: acusaron que el resto de los partidos del bloque había terminado aislando a la DC.

Los discursos del presidente del Senado, Andrés Zaldívar y del ex diputado Gutenberg Martínez marcaron el tono del debate. El senador por el Maule reveló las conversaciones privadas que sostuvo con altos dirigentes del bloque -varias de ellas en su propia casa- en las que dijo haber transmitido que no podían arrinconar a la DC.

"Les pedí que fuéramos en una sola lista parlamentaria, campaña convergente entre Guillier y Goic, si no era posible les pedí que tuviéramos dos listas equilibradas. Nos cerraron la puerta, nos cerraron la puerta, se jugaban más cosas personales, candidaturas que interesaban en uno y otro sector", dijo Zaldívar.

Martínez, por su parte, defendió la idea de desechar cualquier tipo de acuerdo con la Nueva Mayoría e insistió y menos con la IC y el MAS. "Confundiríamos a la opinión pública", dijo ejemplificando que en un debate Goic tendría que responder por los "muertos de Venezuela". Así las cosas, los delegados, al cierre de esta edición, definían por mayoría que la DC debe pactar con ambos partidos para mantener la identidad de centroizquierda.