Las otras veces en que Aguas Andinas debió cortar el suministro y fue multada

En la madrugada del domingo, Aguas Andinas envió un comunicado anunciando que a partir de las 8.00 de la mañana de ese día comenzaría un corte masivo de agua potable que afectaría a 30 comunas de la capital, producto de los aluviones que se produjeron en San José de Maipo tras las lluvias en sector altos de la cordillera.

Este fenómeno enturbió el agua del río Maipo, del cual depende la sanitaria para abastecer a gran parte de la capital.

El corte finalmente afectó a cerca de seis millones de personas, en un millón y medio de hogares de la Región Metropolitana. 

Pero esta no es la única vez en la que la empresa sanitaria ha tomado este tipo de medida producto de catástrofes naturales. Y es que el 22 de enero y entre el 9 y 10 de febrero de 2013, se interrumpió el suministro de agua potable afectando a 800 mil personas.

En esa oportunidad, los cortes ocurrieron debido a precipitaciones en la cordillera que provocaron turbiedad en las aguas y con ello, la imposibilidad de que Aguas Andinas operara a máxima capacidad su planta de tratamiento. Por este motivo, meses más tarde, la Superintendencia de Servicios Sanitarios (SISS) dictó una multa de $797.662.800 luego de dos procesos sancionatorios. En esa oportunidad el organismo fiscalizador señaló que pese a haber estado frente a una emergencia producida por situaciones de fuerza mayor, "la empresa no podía desatender, ni dejar de ajustarse a procedimientos que dieron pronto restablecimiento a lo que constituye su obligación esencial de servicio, bajo un análisis de racionalidad en los medios y recursos disponibles".

La infracción consideró las deficiencias en la calidad de la atención, haber afectado a la generalidad de los usuarios y no haber atendido las instrucciones impartidas por la SISS en materia de gestión de emergencias.

2016

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El mismo hecho ocurrió años después el 16 de abril de 2016, cuando la empresa anunció un nuevo masivo corte por la turbiedad " extrema" del río producto de las lluvias cordilleranas, el cual afectó a más de un millón personas de la RM y se prolongó por más de 24 horas para 29 comunas.

En esa oportunidad la Onemi decretó alerta roja para los lugares afectados, y amarilla para el resto de la región, luego de que la turbiedad superara las 65.000 UNT (unidad de medición de turbiedad) provocado por rodados en los ríos Maipo y Mapocho por las condiciones meteorológicas.

En agosto de ese año, la SISS aplicó dos multas de cerca de 450 millones de pesos en total. Una de ellas porque en una investigación que se realizó se determinó que durante la emergencia no se encontraban en operación los Pozos de Renca y Providencia, ni tampoco la ampliación de la planta de tratamiento de agua potable en las Vizcachas.

La resolución de la superintendencia señala que "la compañía puso en operación la conducción de agua cruda desde el embalse El Yeso a los drenes Azulillos, registrándose 7 horas más tarde los primeros registros de turbiedades altas en el sector de San Gabriel, todo lo cual, constituyó incumplimientos en la actualización del plan de desarrollo de la concesión Gran Santiago, quedando como obligatorio en tiempo y forma de dichas obras para hacer frente a eventos de turbiedad".

"A lo anterior se sumó que la SISS había requerido a la concesionaria implementar mejoras en los planes de emergencia ante situaciones de turbiedad extrema en las fuentes superficiales. Sin embargo, se constató que el prestador comenzó a monitorear los eventos recién 2 días después desde que se activó la Alerta, cuando en definitiva las condiciones climáticas adversas al interior de la cuenca ya estaban en plena manifestación", agregaron.