Sección: Opinión
Luego del hito de haber alcanzado un acuerdo previsional, el gobierno y los partidos deben avanzar en una urgente reforma que repare el sistema político. Los tiempos para hacerlo son muy estrechos, y de no concretarla ahora habrá que esperar un período adicional. El Presidente Boric ha quedado en un buen pie para liderarla.
Es sintomático de esta nueva etapa, de este Trump 2.0 o en esteroides, la descarada atribución de responsabilidades, completamente sin base ni evidencia, de todo aquello que no resulta, a aquello que él quiere “extirpar”. En este caso, las políticas de diversidad e inclusión.
“¿Se imagina si contáramos con nuestro “Proyecto Chile 2040″ visible en cada web gubernamental, paradero, estación de metro, aeropuerto o carretera? Ese debería ser el sueño país y la épica a construir. Para ello, necesitamos ambición y mirada estratégica de largo plazo. Y comenzar, de una vez por todas, a enfrentar nuestras verdades incómodas”.