Con más de 40 películas chilenas estrenadas, el 2014 se convirtió en un año inusual para la producción local. Sin embargo, el Informe Anual de Estadísticas Culturales que entregó ayer el Consejo de la Cultura y el Instituto Nacional de Estadísticas (INE), comprobó que aquel fue un fenómeno más bien aislado. En 2015 la producción de cine local bajó a 25 películas, al igual que la asistencia, que registró 871.938 espectadores contra los 940 mil de 2014. Eso sí, en términos de recaudación la cifra aumentó en un 74%, con $ 2.637 millones, lo que representa el 3,1% del total de $ 83.790 millones, donde el liderazgo lo mantienen como siempre las producciones estadounidenses. La película chilena con más recaudación fue El bosque de Karadima con $875 millones.

"Tenemos claro que en 2016 la asistencia al cine local será mayor con el éxito de Sin filtro, sin embargo nos parece poco para nuestra industria y los esfuerzos que se han hecho de parte del Estado por visibilizar y valorar la producción local, ya que tampoco se condice con la apreciación que está teniendo nuestro cine en el extranjero", dijo ayer el ministro Ernesto Ottone, durante la presentación del informe en el Museo Violeta Parra, junto a la directora del INE, Ximena Clark.

En cifras totales, el cine registró un aumento con 25.804.000 espectadores contra los 22 millones de 2014. En artes escénicas, sin embargo, la asistencia disminuyó, con respecto al año anterior, tanto en oferta (10,5%) como en cifras de consumo (5,8%); concentradas sobre todo en teatro y danza, quedando atrás la ópera y el circo. En cuanto a los espectáculos musicales, la oferta también disminuyó, esta vez en un 6,4 % con respecto a 2014. La asistencia bajó llegando a poco más de 3 millones de asistentes, lo que representa un 9,7% menos que el 2014.

Frente a estas bajas, el ministro Ottone destacó algunas alzas, como el incremento en la programación cultural de la televisión abierta (la oferta alcanzó un 109% más, pasando de 1.524 a 3.195 horas de programas culturales en 2015). Con respecto a la medición de televisión, hay que hacer notar que en esta ocasión se incluyó a la gastronomía y el patrimonio alimentario como ámbito de carácter cultural, lo que explica el aumento en la medición de cultura en TV abierta: hay un evidente auge de programas de cocina y de viajes. Además, desde fines del 2014, la norma obliga a las señales a transmitir un mínimo de cuatro horas culturales a la semana.

"Hay efectos de moda, la gastronomía durante 2015 tuvo una presencia destacada en los canales nacionales y sin duda, en 2016 va a crecer la producción de ópera y de animación. El impulso lo dio el Oscar para Historia de un oso; pero hay que ser cuidadosos con los análisis y no caer en la fenomenología", aclara el ministro.

Ottone además recalcó la mayor participación en actividades relacionadas con el patrimonio cultural (el Día del Patrimonio registró un aumento de 17,4% en las visitas del último año); y un incremento en la inscripción de libros (en títulos nacionales subió en un 14,1% más que en 2014, llegando a los 1.661). Según el ministro, este último incremento es consecuencia de la Política Nacional de la Lectura y el Libro lanzada en 2015.

En cuanto a la asistencia de exhibiciones de arte se registró un aumento de un 20.6% de los visitantes, respecto de 2014, pero sólo referidos a los museos adheridos a la red Dibam, donde no se contabiliza a instituciones como las galerías de arte, los centros culturales o museos como el MAC o el propio Museo Violeta Parra.

Este año, el Informe de Estadísticas Culturales (ex Anuario de Cultura o Tiempo Libre), sumó a la Fundación Artesanías de Chile y Fundación La Fuente dentro de las 41 instituciones públicas y privadas que entregan información de sus actividades. Además se formaron mesas técnicas con agentes culturales para debatir los datos obtenidos. "Este documento nos sirve para direccionar nuestro trabajo. Durante cuatro gobiernos se viene haciendo un trabajo de crear infraestructura cultural que tiene que ir de la mano con la capacidad de poder llenar estos vacíos de audiencia", señaló Ottone.

En tanto, el sociólogo y Premio Nacional de Humanidades Manuel Antonio Garretón, quien participó del lanzamiento del informe se refirió a los efectos de estos estudios. "Celebro que exista este informe, pero creo que hay que ir un poco más allá. Estos datos deben servir para crear conocimiento y sirven de insumos para crear políticas públicas. Hace falta investigación en base a estas estadísticas y eso se puede mejorar", señaló Garretón.

El Informe de Estadísticas Culturales no sólo mide el consumo, sino también la formación, el empleo, la creación y la comercialización. El documento se puede descargar completo en cultura.gob.cl.