Entre 2003 y 2010 Josh Tillman (35) publicó ocho discos bajo el nombre J. Tillman, pero su carrera nunca terminó de despegar. Insatisfecho con el mundo musical, Tillman decidió comenzar a escribir una novela a principios de la década. Nunca la terminó, pues fue en el proceso de escribirla que recuperó su pasión por la composición. Decidió adoptar un nuevo nombre artístico, Father John Misty, y lo que vino después fue una de las reinvenciones musicales más exitosas del último tiempo.

Bajo ese nombre, Tillman publicó dos aclamados discos: Fear fun (2012) y I love you, Honeybear (2015), transformando al cantautor, cuya música mezcla folk con varios estilos y matices, en una de las voces más astutas y mordaces de la escena norteamericana, con letras que mezclan ironía con profundas reflexiones sobre el ser humano.

Luego de que I love you… -un disco conceptual sobre los altos y bajos del amor moderno- se transformara en un éxito, teniéndolo como número fijo en los principales festivales del mundo, y colaborando con artistas como Lady Gaga y Beyoncé, Tillman decidió hacer algo distinto para su tercer disco como Father John Misty, Pure comedy, que desde el viernes está disponible en formato físico y en plataformas como Spotify y Apple Music, y que ya acumula elogios de la prensa especializada.

El disco es su trabajo más extenso desde su reinvención, con una hora y cuarto de duración, y canciones que llegan a los seis, nueve e incluso 13 minutos. "Hay una tonelada de palabras en este álbum, y quería que la música tuviera mayor claridad. El último disco estaba muy lleno de cosas. Fuimos básicamente Jonathan (Wilson, el productor) y yo, sentados, tocando todo, y puliendo constantemente las canciones. Y no quería hacer otro álbum así en un buen tiempo. Para este disco, quería que respirara más", cuenta Tillman en conversación telefónica con La Tercera. "Honeybear es hermoso, pero también es algo sofocante, ¿sabes? Como que hay muchas cosas pasando todo el tiempo. Con este necesitaba espacio. Lo pienso como mi disco new-age, o algo así. Las temáticas son bastante intensas, entonces quería que la música fuera algo relajante", agrega.

El cantautor cumple su palabra cuando habla de intensidad. Si bien la música es suave, Pure comedy está lleno de ansiedad respecto al mundo actual. En el tema homónimo, ironiza con la política, la religión y el sinsentido de la vida. Cuando lanzó la canción como single en enero, muchos lo vieron como una respuesta al gobierno de Donald Trump, pero Tillman escribió la canción en 2015. "Creo que todo se resume en una línea, que es '¿Dónde encontraron a esos bufones que eligieron para gobernarlos?'. Esa línea sería relevante incluso en la Revolución Francesa, o en cualquier época o elección", explica Tillman, quien agrega: "La canción parte con que los seres humanos somos muy únicos en la desesperanza que nos rige. Y pensamos en el amor como esta cosa etérea y romántica, cuando el amor en realidad es nuestro mecanismo de supervivencia. Si los seres humanos no nos cuidamos mutuamente, literalmente morimos. Entonces la canción repasa nuestra historia y todas las formas que hemos buscado de sobrevivir, con todo volviéndose más complicado y loco. Y termina donde empezamos, lo único que tenemos es el uno al otro. Todo lo demás es una completa locura".

Las agudas letras de Tillman en sus canciones pueden llevar a más de un malentendido. La segunda canción del nuevo disco, "Total entertainment forever", abre con la línea: "acostándose con Taylor Swift /todas las noches en el Oculus Rift", lo que generó el enojo de la fanaticada de la cantante pop. "Es gracioso, la gente siempre me dice que soy irónico, pero luego me preguntan el significado más literal que pueden encontrar: '¿Quieres realmente tener sexo con Taylor Swift?'", cuenta con molestia.

"Sólo sucedió que esa línea terminó en la canción, porque Taylor Swift rima de forma perfecta con Oculus Rift. Lo que espero es que la gente después me crea y entienda que la canción no tiene nada que ver con sexo. Y creo que la gente entiende, pero eligen hacer como que no lo entienden para enojarse. Enojarse es algo muy entretenido para nuestra cultura", agrega.

Tanto durante el disco como esta entrevista, Tillman camina una delgada y compleja línea, con reflexiones honestas y sin filtro que también pueden pasar como auto engrandecimiento: "no soy un entretenedor; soy un artista. El entretenimiento es sobre olvidar tu vida. Jimmy Fallon es un entretenedor. Algunas personas me dicen: 'pero lo que tú haces es entretenido, entonces…', como si yo no hubiera reflexionado sobre ese hecho antes. Pero mi objetivo es hacer que la gente enfrente su vida. Eso es lo que hace un artista". Tillman hace una pausa, como si se diera cuenta que sus frases bordean la arrogancia, y se explica: "Sé que decir eso suena muy pomposo de mi parte, pero… el entretenimiento es heroína. El arte es ácido u hongos. Ambos se sienten bien, pero son sustancias completamente distintas".

A pesar de la melancolía que reina en las canciones del disco, Tillman asegura que desliza algo de esperanza: "Nunca obtienes una respuesta a la mayoría de estos problemas, y las que obtienes rara vez son satisfactorias. Pero la música es una catarsis para mí. Y a lo largo de este disco se puede sentir eso. Entre medio de todos estos cuestionamientos maníacos y ansiosos, al final del disco se siente que no hay nada que temer".