"Cuando conversé sobre la idea de conocer a Elvis con John, Paul, George y Ringo, inicialmente se sintieron desalentados por el temor de que la prensa pudiera estar involucrada" dijo Tony Barrow, quien fue jefe de prensa de los fab four entre 1962 y 1968 según registra BBC.

Pero a pesar del riesgo que corrían de convertirse en "otro sucio circo publicitario" como dijo George Harrison, el 27 de agosto de 1965 se concretó el encuentro.

Los Beatles estaban en medio de una gira por Estados Unidos. Ya causaban furor en Reino Unido y había llegado el momento de conquistar el otro lado del Atlántico. El cuarteto de Liverpool aterrizó en los terrenos gobernados por El Rey, precursor del rock and roll.

Comenzaron las gestiones y John Lennon, Paul McCartney, George Harrison y Ringo Starr subieron a un auto camino a la mansión de Berverly Hills de Elvis Presley. Llegaron cerca de las 10 de la noche escoltados por la gente de Elvis.

Tal como pidieron los creadores de Please, please me, no hay fotografías, filmaciones o audio de aquella visita: "Ellos quería conocer a su ídolo del rock and roll, pero no frente a reporteros y fotógrafos", aclaró Barrow.

El vehículo se fue acercando a la mansión de dos pisos ubicada en una colina. Amplios jardines, muchas ventanas y una forma redonda caracterizaban aquella residencia. "Llegamos al centro del edificio, a una sala enorme, circular, con luz roja y azul, y ahí fue donde compartimos con 'El Rey'", claro que junto a 20 personas más según recuerda Barrow.

En un comienzo ninguno de los fab four emitieron palabras: "bueno, si ustedes condenados muchachos sólo van a estar aquí mirándome, entonces me voy a dormir", dijo Prestley.  El primero en hablar fue John Lennon: "¿Por qué haces en estos tiempos esas películas de baladas suaves? ¿Qué pasó con aquel buen rock and roll de los viejos tiempos?'", pero no fue suficiente para romper el hielo, el Rey solo respondió con una risa.

Tras intercambiar distintas anécdotas, se dio un silencio incómodo como recuerda el jefe de prensa de los británicos: "era justo pensar que cada uno estaba asombrado de la presencia de los otros. Elvis no tenía mucha soltura hasta donde yo podía ver. Se le notaba con vergüenza".

El remedio para aquella situación fue lo mismo que los unía: la música. "De repente Elvis pidió algunas guitarras para John, Paul y George, y apareció un piano". Presley comenzó a tocar con los Beatles y el ambiente cambió radicalmente. "Los chicos descubrieron que podían mantener una conversación mucho mejor con sus guitarras de lo que podían con su palabra. La música era su punto de encuentro natural, su medio de comunicación más inteligente".

"Todo el mundo cantaba. Elvis tocaba unos acordes de guitarra para Paul y le decía: 'Mira, ya estoy practicando " Y Paul bromeaba: 'No te preocupes, entre Brian Epstein (el mánager de Los Beatles) y nosotros te convertiremos en una estrella'", registra BBC sobre aquel único e irrepetible evento privado.

Existe un video de una conferencia de prensa disponible en YouTube en que se le pregunta a los Beatles qué opinan de quienes los ven como los "Elvis británicos", la cual es respondida rápidamente por Ringo Starr, quien grita "no es verdad!!!" e imita los movimientos de Elvis a modo de burla.

Sin embargo, en realidad admiraban al Rey del rock and roll según declaró Barrow: "Ellos trataron de tomar el encuentro a la ligera y no mostrar demasiado la adoración a su ídolo, pero Elvis Presley fue su ídolo y una de las influencias principales de la música de los Beatles".

https://www.youtube.com/watch?v=zWSfqQcJ9tE