LCD Soundsystem: una vuelta de ensueño

Un 27 de febrero de 2001, LCD Soundsystem ponía fin a poco menos de una década de historia con una impecable versión de "New York, I love you but you're bringing me down" en el Teatro Caupolicán de Santiago de Chile.

El anuncio, tan rápido como inesperado, tomó por sorpresa al medio musical planetario que asestó el golpe y llevó a la banda a organizar una nueva "despedida" algunas semanas después —el 2 de abril de ese año— en el Madison Square Garden neoyorkino.

Fue en ese concierto que James Murphy, siempre tan bien despeinado, creía que podían agotar las entradas con apenas dos semanas de publicidad. Incrédulo, el promotor pensó que no y ofreció añadir a Big Boi de Outkast al evento. Los LCD, por supuesto, se negaron. Entonces el recital fue anunciado pero ocurrió algo inesperado: las entradas se agotaron en apenas minutos.

De esa jornada de ensueño se editó el documental Shut up and play the hits, de Will Lovelace y Dylan Southern, y aunque, por así decirlo, el telón se cerró para la banda, la sensación que quedó fue de que el grupo no se había terminado en realidad.

Ahora, el cantante y productor de 47 años regresa a Santiago con American dream, un disco que en palabras del crítico musical Marcelo Contreras, "juega con la memoria emotiva, la familiaridad, el voltaje transformado en música como un latigazo bailable. Ensamblan esos sonidos y ritmos que ya conoces, todo como si fuera la primera vez. Un ligero embuste que resulta de maravillas".

Prueba de lo anterior son los recientes conciertos en Inglaterra, que incluyen el repaso obligatorio por el tridente LCD Soundsystem, Sound of silver y This is happening.

Según Contreras, David Bowie es central en el nuevo álbum. Murphy estuvo a punto de producir su disco/despedida Blackstar, pero terminó colaborando con percusiones y el hombre de "Ziggy Stardust" lo alentó a reformular su banda.

https://www.youtube.com/watch?v=2KFIOfNCq4Q