Hace 30 años una película vino a dejar su marca en la historia del cine, gracias al cuento de hadas que un abuelo decide contarle a su nieto enfermo. Pero éste no era el típico relato sobre romance y valentía, ya que también incluía grandes cuotas de humor y una galería de singulares personajes. Todo lo que convirtió a La princesa prometida en uno de los estrenos destacados de 1987, que con el paso de los años sería parte de varios listados con las mejores comedias de todos los tiempos, como los del American Film Institute (AFI) y Channel 4 de Reino Unido.
Basada en el libro homónimo de William Goldman, la película dirigida por Rob Reiner (Cuando Harry conoció a Sally) muestra la aventura de Westley (Carey Elwes) y Buttercup (Robin Wright) para concretar su amor, luego de que ella es raptada por el príncipe Humperdinck (Chris Sarandon) y obligada a casarse con él, pensando que Westley ha muerto. Sin embargo, éste retorna como un pirata y trata de recuperarla en compañía de Inigo Montoya (Mandy Patinkin), Vizzini (Wallace Shawn) y Fezzik (André the Giant).
Y para celebrar sus tres décadas, los cines de Estados Unidos darán funciones de La princesa prometida el 15 y 18 de octubre. Además, diferentes medios de Norteamérica han dedicado varias de sus páginas a recordar la película y también a revelar algunos de sus secretos: como que Colin Firth fue la primera elección para rol de Westley y Arnold Schwarzenegger para Fezzik, y que la cinta casi no se realizó por problemas con los derechos del libro por casi una década.