En 1977, el director de cine Roman Polanski violó a una niña de 13 años llamada Samantha Geimer. Por tal crimen, el cineasta fue condenado por la justicia estadounidense y cumplió 45 días en prisión para luego huir y vivir en el exilio. Su orden de arresto en Estados Unidos aún está vigente por lo que ha optado por continuar su carrera en el extranjero.
A pesar de estos antecedentes, el también director de cine Quentin Tarantino salió en su defensa durante una entrevista de 2003 que regresó a las redes sociales a comienzos de esta semana. En conversación con Howard Stern, el director de Kill Bill aseguró que Geimer consintió el acuerdo y que el verdadero delito fue que la joven era menor de edad.
La víctima de este hecho declaró en The New York Times: "Está equivocado, les apuesto que lo sabe. Espero que no se siga avergonzando a él mismo hablando de esa manera", y recientemente Tarantino publicó un comunicado a través de Indiewire en el cual se disculpa por aquella entrevista:
"Quiero disculparme públicamente con Samantha Geimer por mis comentarios en The Howard Stern Show especulando en torno a su crimen que fue cometido contra ella. 15 años después, me doy cuenta de lo equivocado que estaba. La señorita Geimer fue violada por Roman Polanski. Cuando Howard mencionó a Polanski, incorrectamente jugué al abogado del diablo en el debate por ser provocativo. No consideré los sentimientos de la señorita Geimer y por eso me disculpo profundamente. Así que, Señorita Geimer, fui ignorante, insensible y sobretodo, incorrecto.
Lo lamento Samantha".