Guillermo del Toro volvió a su tierra natal y fue recibido como un ídolo. Después de coronarse ganador de los premios de mejor película y mejor director por La forma del agua, el mexicano retornó al país donde nació y creció, para dar una serie de clases en el Festival de Cine de Guadalajara.

Si bien, en sus planes estaba dar una masterclass para 4 mil alumnos, más de 30 mil personas se inscribieron después de que el director ganara el Oscar y aumentó los eventos a 3. Las tres clases se llamaron De Geometría a La forma del agua e hicieron un recorrido por la carrera del mexicano.

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Además de entregar sus conocimientos sobre cine, del Toro ofreció una beca anual para una persoan que quiera dedicarse a hacer películas. La Beca Internacional Jenkins-del Toro permitirá que un joven mexicano obtenga 60 mil dólares para estudiar en una renombrada escuela de cine en cualquier lugar del mundo.

Durante su discurso de aceptación del premio Oscar, Guillermo del Toro le dedicó el premio a todos los jóvenes cineastas. "Aquellos que nos están mostrando como las cosas se hacen en cada país del mundo. Yo fui un niño enamorado de las películas. Pensé que esto nunca iba a pasar y pasó. Quiero decirles, a todos los que sueñan con usar el género de fantasía para contar las historias sobre las cosas que son reales en el mundo hoy, ¡puedes hacerlo! Esta es una puerta, patéala y entra", señaló.

En la ocasión, el director se convirtió en el tercer mexicano en obtener un premio de la Academia en la categoría de mejor dirección. El primero fue Alfonso Cuarón en 2014 por Gravedad y le siguió Alejandro González Iñárritu por Birdman (2015) y The revenant (2016).