Este domingo, los cerebros detrás de Stranger Things, junto a miembros del elenco de la popular serie, se reunieron en el teatro Dolby Theater de Los Angeles (EE.UU.) en el marco del PaleyFest: evento que convoca anualmente a numerosos proyectos televisivos.
Fue en esa instancia llena de fanáticos que se revelaron algunos detalles de lo que será la tercera temporada de la serie, que espera llegar a la pantalla en 2019.
El productor ejecutivo del proyecto, Shawn Levy, confirmó que la historia se desarrollará un año después de los hechos ocurridos en el ciclo anterior, ambientándose ahora en el verano de 1985.
Y además, dos romances se tomarán la pantalla: el de Eleven (Millie Bobbie Brown) con Mike (Finn Wolfhard), y Lucas (Caleb McLaughlin) con Max (Sadie Sink), dos parejas que iniciaron sus historias al final del ciclo pasado.
"Mike y Eleven van fortalecidos, así que esa relación continúa, y lo mismo con 'Mad Max' y Lucas. Pero una vez más, son niños de 13 o 14 años, ¿qué significa un romance en esta etapa de la vida? No pueden ser relaciones simples y estables y esa inestabilidad es divertida", comentó Levy.
El productor adelantó además que Steve, interpretado por el actor Joe Keery, tendrá un rol aún más crucial en la nueva entrega. "Definitivamente veremos algo más de Steve Harrington en la tercera temporada, y solo diré que no abandonaremos la magia de 'Dad Steve' (papá Steve). No quiero decir mucho más, pero literalmente siento que estábamos caminando y tropezamos con una mina de oro con 'Dad Steve'", comentó el creativo sobre el personaje, ya que el adolescente, ex novio de Nancy (Natalia Dyer), se ha transformado en todo un maestro para Dustin (Gaten Matarazzo).
Además, si Los Cazafantasmas marcaron la segunda temporada, esta vez lo hará Volver al Futuro.
Si bien la serie volverá a la pantalla el próximo año, Levy reveló que su producción comenzará este mes.
