Power, Corruption & Lies: la transición de New Order
El segundo álbum de la banda mancuniana posicionó al grupo con un camino propio que conjugaba la electrónica y el post punk.
Esta semana se cumplen 35 años de Power, corruption & lies, el segundo disco de New Order. En su momento, se trató de un trabajo que causó impacto en quienes venían siguiendo al conjunto con su anterior identidad de Joy Division, porque acá quedó descubierta la transición hacia un sonido combinado de electrónica dance con oscuro post punk.
En 1980, con la inclusión de la tecladista Gilian Gilbert (quien originalmente era guitarrista de la banda punk The Inadequates), Bernard Sumner, el líder y guitarrista de New Order, pretendía darle protagonismo a un instrumento con el que ya habían tenido alguna aproximación. En esta decisión fue clave la influencia de la banda alemana Kratfwerk.
En su autobiografìa (titulada New Order, Joy Division y yo), Sumner señala que ya en su época con la banda de Ian Curtis estaba entusiasmado con los teclados y los sintes. Cuenta que durante la tensa grabación del EP An Ideal for living, el productor "ensayó algunos sonidos en su sintetizador y nos preguntó qué tipo de cosas nos gustaban. 'Kraftwerk y Donna Summer', dijimos, y sus ojos se iluminaron".
Así, no es extraño que en el primer longplay, Movement (1981), hayan existido guiños a dichos sonidos ("Chosen time", por ej), y más aún en el EP 1981–1982 que traía clásicos como "Temptation" o "Everything's gone green", más cercanos al dance que cualquier otra cosa grabada con anterioridad.
De esta forma, en 1983 el cuarteto de Manchester se encontraba listo para seguir profundizando en su exploración musical que conjugaba el post punk y el synth pop. El resultado fue Power, corruption & lies.
La canción "Age of consent" en cierta medida resume bien el elepé: el riff de inicio del bajo de Peter Hook podría haber estado en un álbum de Joy Division, pero acá se le adicionó la ambientación electrónica. En este mismo espíritu se encuentra el track final "Leave me alone".
La cosa se pone más dance con "The village", con el clásico hi-hat del house que a costa de corcheas hace caminar al tema y al oyente. También con "5-8-6", "Ectasy" y con "Ultraviolence".
En "Your silent face", el pattern de la batería podría ser el de un tema punk, pero con el pulso más lento y con un sonido tipo industrial en el tambor. Esto hace el link con la música de sintetizadores y máquinas.
En definitiva, sin un largaduración de tránsito como este, los New Order no hubiesen encontrado su estilo tan particular que fue el que los llevó al éxito.
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