El músico Cristian Aldana está detenido en prisión preventiva en Argentina desde el 22 de diciembre de 2016, procesado por el delito de abuso sexual con acceso carnal gravemente ultrajante y corrupción de menores en siete oportunidades.

En la causa, perseguida por la justicia argentina, siete mujeres son las que lo acusan, pero hay por lo menos cuatro más que van a aportar sus testimonios, según consigna Rolling Stone en ese país.

El hombre de "No me importa morir" puede recibir una pena de hasta 20 años de cárcel por los cargos que le imputan.

Según el fiscal Guillermo Pérez, quien trabajó en colaboración de la Unidad Fiscal Especializada de Violencia contra las Mujeres (UFEM), organismo que recibió las denuncias e hizo la investigación preliminar, los casos de las denunciantes muestran un patrón de conducta por parte de Aldana: todas eran sus fans, cuando empezaron a estar con él tenían entre 13 y 16 años, la mayoría no tenía experiencia sexual y tenían una situación familiar crítica.

Además, querían ser músicas y las contactaba a través del blog de El Otro Yo.

En conversación con Rolling Stone Argentina, algunas de ellas contaron su experiencia. "C. dijo que el primer contacto fue en ese chat, lo primero que su ídolo le dijo fue: '¿Sos virgen? Pasame tu teléfono'. Otra situación que se repite es que varias de ellas fueron abusadas antes de la relación con Aldana, por parte de familiares. Según el relato de C., a él eso lo excitó y le dijo: 'eso te pasó porque sos re puta'".

Los casos de abuso relatados por la revista ocurrieron entre 1999 y 2010, siempre en las oficinas del sello discográfico de la banda, Besótico.

Un "apoyo" insospechado

En abril de 2016, ante una denuncia por violación que una chica publicó en contra de Miguel del Pópolo, cantante de La Ola Que Quería Ser Chau, en las redes sociales, y ante el sinfín de mensajes condenatorios de los fans, Aldana posteó en su Facebook respaldando a las víctimas.

Su mensaje de "apoyo" operó como una caja de resonancia en Internet y rápidamente comenzaron a publicarse testimonios en su contra.

Al poco tiempo, tres supuestas víctimas hicieron un video donde relataron la violencia que sufrieron por parte del cantante. A partir de ahí, se unieron, subieron su testimonio a las redes, recibieron más casos y se acercaron a UFEM para denunciar.

Fue cuando las abogadas realizaron la investigación preliminar y denunciaron el que sea tal vez el caso más emblemático de abuso sexual en el rock argentino.

En enero del año pasado, Cristian Aldana sostuvo una conversación por correspondencia con Rolling Stone desde la cárcel, donde dijo que "no existieron tales encuentros, individuales ni grupales. Ni siquiera tengo conocimiento personal con las denunciantes, más allá de que ellas, como seguidoras de EOY, hayan ido a los shows".