Tal como ocurrió con el asesino de Patricia en La madrastra, o las razones que llevaron a los sobrevivientes de un vuelo a quedar varados en una isla en Lost, la serie de Luis Miguel, desde su estreno en abril, cautivó a la audiencia con la promesa de resolver una interrogante; en este caso, el mayor misterio en torno a la vida del cantante mexicano. Una pregunta que por ahora seguirá sin respuesta para el público, ya que anoche, en el episodio 13 de su primera temporada, la comentada producción de Netflix y Telemundo finalizó sin revelar el destino de Marcela Basteri, la madre del artista, desparecida en 1986.
Además de referencias a Chile, en especial a la participación del solista en el Festival de Viña -aunque con algunas imprecisiones en las fechas-, el capítulo entregó imágenes reveladoras de la biografía de Luis Miguel, en especial de la muerte de su padre, Luis Gallego, en 1992, y del proceso que lo llevó a reconocer a su hija, Michelle Salas. En tanto, el caso de Basteri, que según diversos biógrafos del cantante habría muerto, culminó con un final abierto, a la espera de una posible segunda temporada de la producción que sería oficializada en los próximos días.
