Luego de un extenso tour mundial de casi un año, Roger Taylor (66) aprovecha su tiempo libre hojeando libros, componiendo piezas musicales para películas independientes y escuchando alguna que otra banda actual, como los islandeses Sigur Rós, sus favoritos. Pero los días de relajo en Inglaterra terminarán pronto para dar paso a los ensayos, los aviones y la vuelta a las giras. Esta vez con destino a Sudamérica, la última estación confirmada del recorrido planetario de Queen y su más reciente encarnación, que completan el guitarrista Brian May -el otro sobreviviente de la formación histórica- y el joven cantante Adam Lambert. Una nueva visita a la región que terminará el próximo 30 de septiembre en la Pista Atlética del Estadio Nacional, en el reencuentro del legendario grupo inglés con una fanaticada local que ya agotó buena parte de las localidades.
"Creo que lo hemos pasado mejor que en cualquier otra gira, y eso que Brian y yo llevamos muchos años en esto. La verdad, no pensamos que haríamos de nuevo estos grandes tours, pero Adam, con su juventud y su talento, hizo posible que volviéramos a disfrutar de estar otra vez tocando por el mundo", asegura por teléfono a Culto el baterista y fundador de Queen, sin escatimar elogios para su actual frontman. Un histriónico cantante pop de 33 años, ex participante del programa American idol, que desde 2012 no sólo ocupa el lugar que dejó vacante Paul Rodgers -el vocalista con que el grupo debutó en Chile en 2008- sino que además intenta revivir sobre el escenario el legado de Freddie Mercury.
Y aunque para nadie debe ser fácil ocupar el sitio del que para muchos fue uno de los mejores cantantes del siglo XX, Lambert cuenta con un sólido respaldo: un repertorio plagado de clásicos del rock, y que en esta gira llega a las 30 canciones en vivo, con himnos como Bohemian rhapsody, Radio ga ga y Under pressure. Éstas dos últimas, por cierto, coescritas por Taylor, quien adelanta que lo que se verá en Santiago será similar a lo mostrado en el resto del tour, "aunque es muy probable que cambiemos 3 o 4 canciones, porque así es más entretenido para nosotros también".
-¿Recuerda algo de su show anterior en Chile hace siete años?
Para serte sincero, lo que más recuerdo es que el público estaba algo dividido, así que espero que esta vez sea algo más parejo. Parecía que la gente con dinero estaba al frente y el resto atrás, así que intentaremos que no sea así esta vez. La verdad, me molestó un poco eso, me pareció que quizás la gente equivocada tenía los mejores asientos.
-¿Hay una relación especial entre Queen y el público sudamericano? Se dice que el tema Las palabras de amor (1982) se lo dedicaron a sus seguidores de esta parte del mundo.
Así es. La primera vez que fuimos a Sudamérica no pudimos ir a Chile lamentablemente, pero sí tocamos en Brasil y Argentina. Recuerdo que Brian quedó muy inspirado con la fantástica recepción que tuvimos, así que decidimos, como forma de mostrar nuestra estima, escribir una canción con un coro en español, porque no todo tiene que ser siempre en inglés. El público fue muy cálido. Para nosotros ver cómo cantaban las canciones en nuestro idioma, lo vimos como un muy lindo gesto de generosidad, así que quisimos devolverles el gesto.
-De acuerdo a un documental de la BBC, en su segunda visita a Sudamérica, en 1985, vendrían al Estadio Nacional de Santiago, pero las autoridades de la época se los habrían impedido. ¿Recuerda algo de aquel episodio?
Todo lo que recuerdo es haber pensado que era fantástico poder tocar en Chile, y luego vino la decepción cuando no nos permitieron ir a Santiago. Eso fue en 1985, y es en realidad lo único que recuerdo porque fue hace mucho tiempo.
-Tras el fin de esta gira latinoamericana, ¿hay planes de grabar algo en el estudio junto a Adam Lambert?
Sería genial grabar algo con Adam, aunque fuera una sola vez. Creo que tiene sentido también, pero por ahora no tenemos planes concretos al respecto. Creo que es una especie de extensión lógica de lo que estamos haciendo, poder sacar algún nuevo clásico, así que quizás debiéramos ponernos a componer.
-¿Cómo fue el proceso para realizar el compilado Queen forever (2014)? ¿Quedaron conformes con el resultado?
Fue un disco muy difícil de armar, costó escoger las canciones. Fue un ejercicio interesante pero complicado también. Tengo que admitir que no quedé demasiado contento. Para ser honesto, teníamos unas versiones increíbles del material de Freddie con Michael Jackson, pero lamentablemente su sello nos puso restricciones y no nos dejó sacarlas justo después del disco de Michael. Fue frustrante, porque creo que las versiones que quedaron en el álbum no son tan buenas como otras. Espero que algún día puedan ver la luz.
-Este 2015 se cumplen 40 años desde el lanzamiento de A night at the opera, para algunos, el mejor disco de Queen. ¿Qué se le viene a la cabeza cuando piensa en ese disco?
Bueno, lo primero es que me cuesta creer que ya han pasado 40 años (se ríe). Es mucho tiempo. Para nosotros fue un punto de quiebre, un hito. Un momento muy importante en nuestra carrera que nos llevó a otro nivel, gracias a canciones que terminaron siendo clásicos, como Bohemian rhapsody.
-¿Cree posible que salga otro disco como ese en la actualidad?
Lo veo muy difícil. Ahora todo es más rápido, la gente escucha y descarga canciones sueltas. Obviamente siguen saliendo álbumes exitosos, pero A night at the opera incluía muchos estilos distintos. Ahora tienes que tienes una oportunidad para apuntarle a un éxito y cuesta darse el lujo de presentarle al público una gran obra como esa. A mí me parece que casi toda la música actual suena parecida, es raro escuchar un disco tan variado, que cubra tantos terrenos.
-¿Cuál es el estado actual de la película biográfica sobre Freddie Mercury?
Estamos trabajando con un gran guionista aunque por ahora con Brian estamos más bien esperando a Hollywood para que haga su tarea. En cualquier caso no estamos totalmente involucrados en el proyecto, no estamos participando directamente en él, pero como apareceremos en la historia tenemos un poder de veto, y queremos que sea una buena película. En realidad no nos preocupa demasiado cuánto tarde en terminarse. Y debo decir que al parecer tiene para un buen rato más.
*Publicado originalmente el 5 de septiembre de 2015 en La Tercera.
