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Tres, dos, uno, ¡tiempo!

A la sombra del último partido de la Copa Libertadores, el domingo al mediodía bonaerense comenzó la final internacional del Red Bull Batalla de los Gallos.

La humedad de la capital argentina puso el picante en un ambiente de efervescencia adolescente y mensajes de autoayuda y superación, con más de trece millones de personas siguiendo el streaming del evento desde distintos puntos del planeta.

Pero, ¿qué miraba toda esa gente a través de la pantalla?

-Yo empecé no tanto porque me gustaba el rap, sino porque rapeando podía expresar lo que pensaba, de un momento a otro, no necesariamente con una base sino a capela, como a mí me plazca.

Cuarenta y ocho horas antes de la gran final, Benjamín Urbina, 20 años, alias Pepe Grillo, criado en San Luis de Macul, comuna de Peñalolén en Santiago de Chile, recuerda su comienzo en el arte del hip-hop en la planta baja de un hotel.

-Mis inicios, supongo que como todos los raperos de acá, fue en una plaza.

El único chileno entre los cracks mundiales de la improvisación fue descubierto por amigos y juntaba poco más de $10 mil al día rapeando en autobuses que después se transformaron en vagones de metro, y luego, cuando sus mismos amigos lo empujaron, en competencias contra otros chicos como él.

-¿Mi técnica en batallas? Me gusta responder y que ojalá sea con la misma terminación o tema, y darle un contraargumento y contundencia a la rima. No leo tanto, pero sí me quedo en Internet y veo documentales. Si escucho alguna palabra que no conozco, la busco para no quedarme con las dudas o que después me digan algo y quedar sin tema.

Precisamente arriba del Transantiago, antes de competir como freestyler, se pasó cuatro años respondiendo a los estímulos de un público muchas veces hostil y de caras largas.

-Eso me sirvió para enfrentarme a cualquiera. Pero al final es la música, hermano, eso es lo que queda.

Así explica el veinteañero —seguidor del rapero Mantoi, "es el mejor de Chile", y de nombres clave del género como Vico C, Mexicano, Tempo, Temperamento, Maestro y Orishas, "todos fueron una gran escuela"— su motivación en esta competencia.

La mañana del viernes previo a la final, apoyado en una pared en el centro de Buenos Aires —donde más tarde irá a grabarse improvisando algunas rimas—, Pepe Grillo no deja de pensar en el domingo.

-Hace hartos años que empecé a rapear y jamás me vi en un lugar como este y mucho menos representando a mi país. O a los miles de amigos que tengo en esta disciplina. Hay que darlo todo.

De vuelta a la final, desde temprano, la columna humana para entrar al Club Hípico Argentino contaba varias cuadras. Los seguidores del rap improvisado allende la cordillera respondieron al llamado y animaron una verdadera fiesta con 16 freestylers finalistas y un solo gran protagonista, el local Wos.

Más de 10 mil asistentes al recinto que da espaldas al Monumental de River Plate y el Río de la Plata, vivieron en directo la final en donde se cobró revancha contra el mexicano Aczino con contraataques como este:

Aczino: Sí, yo lo mando hasta Miami/ le saco la pistola y va llorando con su mami.

Wos: Lloro con mi madre/ que está viendo en vivo como me vuelvo padre.

En 2013, Valentín Oliva —el verdadero nombre de Wos— tenía 14 años cuando se acercó por primera vez a competir en El Quinto Escalón, la cita de freestyle más grande de Buenos Aires.

Allí dejó boquiabierto a su rival con un repertorio como el siguiente:

-Me dice enano, mirá cómo lo hundo. Napoleón, 1,50. ¡Y dominó medio mundo!

Así se forjó el nuevo campeón mundial del rap improvisado, que además toca la batería y actúa, batallando en parques y plazas.

Seo2, que a fines de los años 90 brilló junto a Ana Tijoux al frente de la banda chilena Makiza, mira estos encuentros como una nueva vida del rap.

-Las batallas de freestyle, especialmente las de los gallos, le han dado una nueva vida al hip-hop. Hay un nuevo interés por lo que se hace en las calles y han renovado mucho a los creadores. Además, hay toda una nueva generación interesada por esto. Eso es lo que más me gusta. Hemos logrado como cultura hip-hop estar seduciendo a las nuevas generaciones.

Cayu, de 22 años y host de las batallas callejeras del Parque Bustamante de Santiago —conocidas como Dame ese micrófono, DEM—, opina parecido.

-Esta sensación de que la gente se interese por el arte callejero del freestyle me produce un orgullo enorme. Yo soy de la época en que iban siete personas de público.

Según cuenta Tomás Gutiérrez —su nombre real—, todo se desbordó el año pasado a la altura de septiembre.

-El movimiento del freestyle callejero está como del 2010 en Chile. Antes se juntaba en el Parque la Castrina el San Joaquín, después se expandió y llegó gente de todos lados, y hubo que moverse al Parque O'Higgins, hasta que llegamos al Bustamante. Esto se empezó a descontrolar en septiembre de 2017. Hubo una batalla en youtube que se hizo viral y empezaron a llegar muchos freestylers, más de 300, y como dos mil personas de público.

De vuelta a Buenos Aires, el estudiante de trabajo social dice que hay un alto nivel en el torneo, pero tiene un pálpito para la última batalla.

-Veo una final entre Aczino y Wos.

En la primera tanda, Valles T (Colombia) le ganó a KDT (República Dominicana), Bnet (España) hizo lo propio con Switch (Ecuador), Pepe Grillo (Chile) con Yeriko (Cuba), Arkano (España) venció a Dozer (Argentina), Wos (Argentina) a Rapder (México), Índico (Panamá) a RVS (Costa Rica), Aczino (México) a Jaze (Perú) y Letra (Venezuela) a Neon (Bolivia).

De dieciséis pasan solo ocho: Valles T, Bnet, Pepe Grillo, Arkano, Wos, Índico, Aczino y Letra.

¡Dale Wos, dale, dale, Wos!

Al ritmo de la pinchadiscos chilena, DJ Atenea, que condujo los beats durante todo el evento, el rapero argentino fue desde el comienzo el favorito de los asistentes, entre quienes se contaba el cantante de Los Fabulosos Cadillacs, Vicentico, y raperos que comenzaron décadas atrás como Cenzi.

-La localía siempre va a ayudar mucho, no sé si fue una final justa- dice un músico que pide que no publique su nombre.

Lo cierto es que son los jurados quienes deciden quien avanza y quien regresa a casa antes de tiempo. Así lo explica Seo2:

-Los jurados miden la actitud. Cómo te paras arriba del escenario, porque eres un MC, un maestro de ceremonias, y vienes aquí y tienes que conectar con la gente. Mientras más personaje seas y logres conectar con la gente, funciona. También cosas más técnicas que tienen que ver con punch, el golpe en la rima, o la contrarrespuesta, que es una rima con la que te sacas ese golpe. Cuando logras conectar con el público creces arriba del escenario, aumenta tu tamaño, porque si tiras una rima y nadie la grita, por muy buena que sea, te vas a empezar a apagar. Tu cabeza se va a preguntar qué hago y hay muy poco tiempo en juego, todo es casi instantáneo.

Mucho más adelante, ya en semifinales, Wos despachó al colombiano Valles T —la sorpresa del evento— en medio de una prueba con objetos. Al argentino le tocó un paraguas que usó con frases incendiarias como:

-Van a llover mis rimas/ mejor que lo abra porque cae el agua/ se hace el Pablo Escobar y anda vendiendo paraguas.

Aunque también hubo dedicatorias a la prensa local:

https://twitter.com/Lautafym/status/1071850742531670019

El derrotado Camilo Ballesteros, nombre real de Valles T, nació hace 21 de años en Cartago, pero fue criado en Cali donde aprendió a rimar sobre las micros y gracias a su hermano, a quien mataron en 2012.

En su camino por ser uno de los cracks de la improvisación en el mundo —terminó tercero del mundo—, Valles T dejó fuera de camino en la primera batalla de la jornada a KDT, el representante de República Dominicana, con rimas como esta:

-Por aquí ha llegado el aguacero/ está lloviendo flow de Ballesteros/ vos no te acerques compañero/ Arkano, te van a dar un beso primero.

Luego, en un duelo ajustado, fue el turno del chileno Pepe Grillo. El colombiano, con mucha actitud y una polera de Rick and Morty, se llevó una ovación con su comentado "paso del robot" y mandó al chileno a sentarse, incómodo y sin posibilidad de regresar al escenario:

-Así que dime cómo te hago, my bro/ mira como vengo rapeando al estilo del hip-hop/ doy un paso luego otro, ya la gente lo entendió/ es que mato a Pepe Grillo con el paso del robot.

Pepe Grillo, visiblemente obcecado, ofuscado y luego cabreado, llegó a publicar en sus redes que no volverá a la competición.

Sí lo hará en lo estrictamente musical. Según contó a Culto, el rapero anunció que está trabajando en su primer disco de estudio junto a Latin Bitman como productor.

Mauricio Hernández González es el verdadero nombre de Aczino, el ganador del año pasado y el último participante en tener rival en la etapa de sorteo.

Nadie quería encontrarse con el hombre de 27 años. Pero le tocó al español Bnet en semifinales, otra de las sorpresas del evento, que recibió la artillería del campeón mexicano en la prueba de objetos:

-Eh, que tú no me lo pones/ y ya no lo sabeís, se acabó tu tiempo en rap y ahora dedícate al skate- rapeó el español lanzando al suelo una patineta que rápidamente fue fue saltada por Aczino.

-Porque sí sé hacerlo bien —respondió el mexicano entre aplausos y gritos— y si quieres le doy vueltas y le caigo también/ pero, ok hermano, tú inténtalo pero sé que no tienes habilidad/ pero no te preocupes que traje casco de seguridad.

Arkano, una de las mayores decepciones de la Batalla de los Gallos —fue eliminado por Bnet—, dijo hace un tiempo que "el rap es cada vez menos social y antisistema".

Pepe Grillo piensa distinto.

-No, hermano. Quizás en España sea así, pero en Chile todavía estamos luchando contra eso. Se sigue en las micros, se sigue en el metro, allí es donde está el verdadero rap, en las calles.

Seo2 tiene otra lectura.

-No tiene que ver con las batallas directamente. Tiene que ver con que el rap muchas veces es pop, es una música para entretener. No digo que sea lo que yo hago, pero es la tendencia. Tienes artistas como Drake, que son mundialmente conocidos, o todos los artistas trap que están buscando entretener a la gente en vez de hacerlos pensar. Igual es un escape a la mierda que está pasando, pero no es que se haya perdido el mensaje. Yo creo que hoy el rap tiene cabida para todo, pero también ha cambiado la forma de ver el mundo hoy en día. Cuando nosotros hicimos rap con Makiza, Chile era otra cosa. No quiero decir que las injusticias se hayan acabado o que el sistema ya no sigue aprovechándose de los que tienen menos, pero está todo un poco más al alcance, más rápido y el lenguaje del rap ha ido a la par de eso.

Pero, ¿y qué pasa con los MC después de estos eventos de freestyle?

Seo2, que mientras conversa recibe el saludo de más de una docena de raperos de distintos acentos, responde.

-Cuando un freestyler llega a la cima puede capitalizar o no. Y yo creo que los campeones no han hecho grandes cosas. Pero, justamente que algunos se hayan farreado su oportunidad, hace que otros se vayan dando cuenta. DrefQuila pasó por estas competiciones y ahora le está yendo muy bien.