Con voz temblorosa, según consignaron distintos medios españoles, la secretaria general de la Real Academia Española, Aurora Egido, comunicó ayer que no hubo mayoría absoluta en la votación que elegiría al nuevo director de la institución. Tras la sorpresiva renuncia de Darío Villanueva en octubre, quien asumió en 2015 y fue el más férreo opositor al lenguaje inclusivo, los estatutos de la RAE establecen que sus miembros deberán volver a reunirse el próximo jueves para una nueva votación.
La elección recaerá en uno de los tres nombres que más apoyo convocaron: el jurista Santiago Muñoz (18 votos), el periodista Juan Luis Cebrián (12 votos) y el lingüista José Antonio Pascual (un voto). Aunque la académica Inés Fernández-Ordoñez también obtuvo un voto, posee menos antigüedad y no podrá ser electa.