En el Patio de los Cañones de La Moneda, la autora Diamela Eltit (69) partió recordando "a las personas que permitieron que yo esté aquí", citando a su madre y abuela. "Ellas no están, pero viven en mi cuerpo y me hablan todos los días", agregó ante unas 300 personas incluido el presidente Sebastián Piñera, y otras autoridades como la ministra de las Culturas, Consuelo Valdés y de Educación, Marcela Cubillos. Luego la narradora recordó sus inicios en la vida cultura: "En una de las épocas más dramáticas, más dolorosas e imperdonables de la historia del siglo XX, como fue la larga historia de la dictadura, que se extendió porque el dictador siguió al mando del Ejército y como senador de la República".
Así la autora de títulos como Lumpérica y Sumar recordó a quienes la acompañaron "con quienes resistimos desde el punto de vista cultural. Y aquellos que siguen vivos en nuestras memorias". Ante la importancia, dijo, de su madre y abuela, "mi compromiso muy especial con la mujer y su terrible historia de desigualdad. Desigualdad que está en todo y cada uno de los ámbitos de la vida. Especialmente hoy me pregunto cuándo y cómo se va a realizar la paridad salarial, pensando que mujeres al mismo trabajo ganamos menos que los hombres. Si se nos pagan menos, entonces socialmente valemos menos".
Después, la académica de la UTEM, en Chile, y la U. de Nueva York, en EEUU, se refirió a sus orígenes. "Yo provengo de una familia migrante de palestinos y por lo tanto siempre saludaré con mucha emoción a cualquier migrante que llegue a Chile, pensando en mis familiares que llegando se abrieron camino, fundaron familia y generaron cultura".
Además, la quinta mujer en recibir el Premio Nacional de Literatura en su historia, ante 49 hombres, señaló sobre la desigualdad "seguiré pensando en la desigualdad que nos rige, en las familias vulnerables, en el endeudamiento… Para mí todos y cada uno de nosotros valemos lo mismo, pero eso tiene que representarse en el aparato social".
Diamela Eltit agradeció a las autoridades de la UTEM y de la UC: "Tengo el orgullo de circular y seguiré abogando para deshacer cualquier hito que problematice o ataque la diversidad sexual, porque eso no corresponde. Nuestros niños tendrán su identidad social y tienen derecho a cursarla como ellos estimen conveniente. Nosotros estamos para apoyar y no para destruir a nuestros hijos", señaló Eltit para terminar con un "muchas gracias".