Ayer se dio inicio a la undécima versión de Woodstaco, uno de los festivales de música más populares del verano local y que se extenderá hasta mañana. Por lo demás, esta vez debutó en el camping Trapiche San Manuel, en Parral (Región del Maule).
Según el productor encargado de su organización, Matías Burgos, la cita busca "compartir la buena música en la naturaleza. La primera versión fue en el patio de un amigo, con 50 personas y una sola banda tocando en la noche". Diez años después, el evento se extiende por tres jornadas, cuenta con cinco escenarios, 100 bandas y una audiencia total de 3.500 personas.
Respecto a la nueva locación, Burgos agrega que "después de viajar más de mil kilómetros en busca de un buen predio, acá encontramos ganas de recibir a Woodstaco, así nos lo han hecho sentir las autoridades". Además, con los años el evento integró otros estilos: hip hop, reggae, y sonidos más rítmicos como la cumbia y la world music. Un ejemplo es la programación de los dos días que quedan: para hoy están anunciados Juana Fe, Sol y Lluvia, Perrosky, Akinetón Retard, La Floripondio, Newen Afrobeat y el artista brasilero Francisco el hombre. Mañana será el turno de La Patogallina, Mauricio Redolés, Vicente Cifuentes y Evelyn Cornejo, entre otros. Burgos acota: "este año vienen cinco bandas de Perú, siete de Argentina y una de Brasil". Las entradas se pueden comprar en el recinto o en la web Eventrid.
