El fenómeno de Tidying Up ha generado cientos de adeptos en la plataforma de streaming, luego de invitar al público a ordenar sus hogares.
Pero todas sus ideas se vieron confrontadas al momento de hablar de los libros, luego que dijese que recomendaba no tener más de 30 textos por casa, postura que formó un intenso debate por las redes sociales. Incluso, ciertos usuarios han tergiversado su opinión, llevando a distintas cuentas de Twitter a decir que la japonesa se había transformado en una versión real de Fahrenheit 451, comprendiendo que ella quería botar o quemar los libros que hacían espacio en sus casas.
En entrevista con IndieWire, Kondo decidió aclarar su propuesta y quitar esta idea de que quiere que la gente se deshaga de sus bibliotecas. Ella, enfatizó que "lo más importante a la hora de ordenar es pensar siempre en lo que tienes y descubrir el sentido del valor, lo que valoras tiene que ser lo realmente importante".
Esta afirmación se complementa con el libro de Kondo The Life-Changing Magic of Tidying Up: The Japanese Art of Decluttering and Organizing (2014, Teen speed press), en el cual aboga por conservar los objetos que transmiten alegría a los individuos, sugiriendo que su opción de mantener 30 libros por casa no debe ser igual para todos.
En referencia a su comparación con el texto de Ray Bradbury, ella insistió en que ha existido una mala interpretación de su postura, ya que esta recomienda que es mejor donar los libros antes que botarlos o quemarlos, siendo esta polémica solo una confusión ante su idea del orden y la limpieza.
Con esta declaración podríamos dar cierre a esta historia que ha visto confrontados a bibliófilos de todo el mundo ante las sugerencias con las que Marie Kondo ha llamado la atención las últimas semanas.