En lo que toca a los Oscar, la noción misma de sorpresa sirve de poco. ¿Qué es sorpresa en el siglo XXI, cuando ya ganó una película fantástica (El retorno del rey) y otra muda (El artista), sin olvidar una hablada en chino mandarín que alcanzó 10 nominaciones en 2001 (El tigre y el dragón)? Tal vez lo sea hoy, pese a todo, el que asome como favorita para el próximo 24 de febrero una película en blanco y negro del circuito de arte y ensayo, ganadora en Venecia, estrenada ya en Netflix y hablada en castellano, la primera en esta lengua en aspirar a la categoría principal.

Este martes, en la madrugada de Los Ángeles, se dio a conocer la noticia que tiene en su centro a Roma, de Alfonso Cuarón. Una a una cayeron las 24 categorías premiables, 10 de las cuales tuvieron a Roma en su consideración, entre ellas Mejor película, Mejor director, Mejor guión original y Mejor actriz protagónica, para Yalitza Aparicio, acompañada por Marina de Tavira como aspirante a Mejor actriz de reparto. Con las mismas nominaciones, pero en 9 categorías, asomó La favorita, del griego Yorgos Lanthimos. De cerca siguen, con 8 nominaciones, El vicepresidente y Nace una estrella, aunque ninguna de estas exhibe el favoritismo de las ya mencionadas. Y un poco más abajo, despuntan Pantera Negra (7), El infiltrado del KKKlan (6), Bohemian Rhapsody (5) y Green book (5).

Que Roma esté donde hoy se la ve, supone desde ya un batacazo. No solo y no tanto para el versátil Cuarón (Y tu mamá también, Harry Potter 3), para el cine de expresión personal y para los latinoamericanos del circuito. También, para Netflix, que viene desde hace un rato cambiando los hábitos del público televisivo y que amenaza con hacer lo propio con la cinefilia de las salas, de los festivales y del consumo doméstico.

Si el parámetro fuesen los pasados Globos de Oro, donde Bohemian Rhapsody y Green book quedaron en gran pie, el cuadro general se alteró, y no para bien, al menos en el caso de la biopic de Freddie Mercury. Esta película de moral Hallmark figura entre las 8 que van por el premio gordo y la posibilidad de que Rami Malek sea ungido mejor actor protagónico es de lo más real. Sin embargo, en esta categoría hay que tomarse igualmente en serio a Viggo Mortensen, protagonista de Green book, que con sus 5 nominaciones, y pese a no correr por Mejor director (igual que Argo, que de todos modos ganó en 2013), tiene cosas para decir. Más aún, y sin entrar en futurologías, he acá un filme que puede ser el gran "tapado" de la ceremonia de febrero. Ello, a nombre de un cine más bien clásico, de marcados énfasis edificantes y humanistas, que se erige como una especie de Conduciendo a Miss Daisy 2.0. Gentileza, vaya ironía, de Peter Farrelly, el mismo tipo que hizo una trash comedy como Loco por Mary y una película tan cínica como Pase libre.

En tanto, queda por ver si Nace una estrella estará a la altura de las expectativas que fue generando: ni Lady Gaga ni Bradley Cooper la tienen fácil en sus respectivas categorías (la primera seguirá siendo visitada por el fantasma de Glenn Close, que amenaza con darle más gloria a La esposa). Eso sí, siempre estará a mano la Mejor canción.

Ahora, la locura por Roma y lo que está logrando no debería amagar las opciones de La favorita, que este jueves llega a salas chilenas y que tuvo igual cantidad de nominaciones. Eso sí, una diferencia significativa entre la película de Cuarón y la del griego Yorgos Lanthimos (El sacrificio del ciervo sagrado), quien lleva ya un buen rato dirigiendo en inglés a estrellas de Hollywood, es que esta última, un drama histórico que también es una comedia negra, sigue patrones más familiares para los votantes de la vieja guardia. Para todos los efectos, el cine corrosivo y estetizante de Lanthimos ya se ha anotado un pleno, que es mucho más de lo que tanto cineasta con fama de transgresor e iconoclasta podría haber querido para sí. Y si se le mira en detalle, esta validación hollywoodense tiene aristas de lo más convencionales. Por ejemplo, la nominación a Olivia Colman como mejor protagónica bien puede inscribirse en la tradición de encarnar a un miembro de la realeza británica para llevarse a cambio alguna estatuilla (y las que recibieron Emma Stone y Rachel Weisz, a mejores secundarias, parecen ir en la misma dirección).

Más sorpresas

Cada nueva entrega supone carreras que se ven ganadas y otras donde cuesta anticipar algo. Ejemplo de lo segundo son este año las cuatro categorías interpretativas. Y si hubo otro tiempo en que aparecer en el acápite Mejor director suponía estar un peldaño arriba, hoy ello no es tan claro. Menos opaco es el hecho de que no solo Cuarón superó expectativas, sino también el polaco Pawel Pawlikowski, cuya Cold war lo instaló también como aspirante a mejor director y en otras dos categorías: Mejor película en lengua extranjera y Mejor fotografía. Hay que ver si Roma, que la desafía en cada caso, le "permite" ganar algo.

Hay ausencias que penan y que deberían llamar la atención de alguien. Por de pronto la de Clint Eastwod y La mula, tal vez porque la crítica de EEUU no fue muy amistosa (por el contrario, el veterano Paul Schrader finalmente fue tenido en cuenta, por su guión para First reformed). También la de The Sisters brothers, primera cinta en inglés del francés Jacques Audiard, y de Leave no trace, de Debra Granik, quien impresionó a la Academia con Lazos de sangre (2010) y cuya ausencia es a su vez elocuente respecto de la ausencia femenina en categorías clave. Y sorpresa, con todo, fue la presencia de Pantera Negra en la categoría principal (primera vez para una de superhéroes): cuando la Academia, antes de desdecirse, anunció que premiaría a la película "más popular", muchos pensaron en esta. Y como la categoría nunca llegó a existir, he acá una nominación con aura compensatoria.

Categorías

Mejor película

  • Pantera Negra
  • Green book
  • Roma
  • Nace una estrella
  • El vicepresidente
  • La favorita
  • Bohemian Rhapsody
  • El infiltrado del KKKlan

Mejor director

  • Spike Lee, por El infiltrado del KKKlan
  • Pawel Pawlikowski, por Cold War.
  • Yorgos Lanthimos, por La favorita.
  • Alfonso Cuarón, por Roma.
  • Adam McKay, por El vicepresidente.

Mejor actriz

  • Yalitza Aparicio, por Roma.
  • Glenn Close, por La esposa.
  • Olivia Colman, por La favorita.
  • Lady Gaga, por Nace una estrella.
  • Melissa McCarthy, por ¿Podrás perdonarme algún día?

Mejor actor

  • Christian Bale, por El vicepresidente.
  • Bradley Cooper, por Nace una estrella.
  • Willem Dafoe, por Van Gogh, a las puertas de la eternidad.
  • Rami Malek, por Bohemian Rhapsody.
  • Viggo Mortensen, por Green book.