“It’s over/ you don’t need to tell me/ I hope you’re with someone/ who makes you feel safe in your sleep/ being tonight”. Así, directamente con un “se terminó” comienza la letra de “No distance left to run”, uno de los singles del álbum 13 (1999) de la banda británica Blur.
La canción, compuesta por el cantante Damon Albarn, es una declaración de desamor. Habla del quiebre de una relación. En este caso, trata del fin de su propio romance con Justine Frischmann, la vocalista del cuarteto Elastica.
Albarn y Frischmann habían comenzado a salir en 1991, cuando eran unos promisorios músicos, el primero lideraba a Blur, y ella había dejado Suede para formar Elastica. Al cabo de los años, ambos alcanzarían la fama mundial con sus agrupaciones.
En entrevista con The Times, Frischmann reveló algunos de los problemas y tensiones a los que la pareja tuvo que hacer frente tras el éxito que alcanzaron.
"Creo que es difícil para cualquiera sobrevivir a la atención de los tabloides, y éramos niños. Éramos niños y no sabíamos lo que estábamos haciendo", señaló la cantante.
"Estábamos bajo mucha presión y no nos vimos mucho una vez que todo comenzó. Y bebía mucho. Era caótico y, mirando hacia atrás, no podíamos haber sobrevivido. No éramos lo suficientemente maduros", agregó.
El quiebre dejó devastado a Albarn, y lo dejó reflejado en el tema. Sin vacilar, señala no querer saber más de su amada. "I won't kill myself/ trying to stay in your life/ I got no distance left to run".
"No tenía ni idea de que las cosas iban tan mal entre Damon y Justine, aunque fuera fácil de adivinar. La relación explotó", cuenta el guitarrista Graham Coxon en el documental llamado –curiosamente- No distance left to run.
"Nos quedó muy claro cuando escuchamos la letra. Y en ese momento, para mí, era una forma de recordarme, que Damon no era un maníaco, ambicioso y despiadado sin sentimientos. Era de carne y hueso y estaba sufriendo. Yo, ya sabes, ese tipo de cosas me hacen quererlo de nuevo, ese: 'vaya, es como yo, pero lo hace de otra forma'", añade Coxon.
El mismo Damon, consultado sobre la composición, declaró en una entrevista: "Me molesta esa canción. Me molestó cantarla. Hacer esa voz me molestó mucho. Para cantar esa letra realmente tuve que aceptar que ese fue el final de algo en mi vida. Es increíble cuando tienes las agallas para haz eso con tu trabajo, porque no te ayuda en absoluto ".