La crítica que hizo Ana Tijoux a la organización del Festival de Viña, por haberle pedido que cantara gratis en la Obertura hizo recordar un episodio que protagonizó Miguel Bosé en la edición de 1982, cuando se presentó sin cobrar en el escenario de la Quinta Vergara.

La historia es la siguiente: la edición tuvo una lenta venta de entradas, tanto que hasta el mediodía del lunes 15 de febrero, dos días antes del inicio, apenas se llevaban un 10% de las localidades vendidas, lo que tenía preocupados a la gente de la Municipalidad.

El entonces alcalde, Edmundo Crespo, apuntaba a la recesión y la falta de turistas argentinos como principales factores. No es casualidad, Chile comenzaba a sentir por esos días los primeros efectos de una fuerte crisis económica.

Según informó La Tercera, el festival comenzó el miércoles 17 de febrero con un 30% menos de venta de entradas respecto a 1981.

Ante eso, comenzó a surgir un rumor: que la organización llamaría al gran triunfador del año anterior, Miguel Bosé, para que "salvara" el evento.

E increíblemente, así sucedió. La Tercera, el domingo 21 de febrero, lo informó así: "Miguel Bosé y su conjunto llegan mañana (lunes) a Viña del mar para actuar GRATIS en el festival. Así lo dijo a festiviña el vicepresidente ejecutivo de la comisión organizadora, Vicente Gaponov. Agregó que el artista aceptó encantado la invitación ya que según le dijo en las distintas llamadas telefónicas a Ciudad de México, "quiero devolver el amor que me dieron en Chile".

"Miguel Bosé vendrá con sus bailarines y sus músicos. Llegará mañana para actuar en la noche y partir al día siguiente de regreso. Refiriéndose a los pasajes y estada, dijo riendo: 'Y qué querían. Que además de actuar gratis gratis se pague él mismo sus pasajes'. Recalcó que lo menos que podían hacer ellos, era traerlos desde México y preocuparse de que estén al día siguiente cumpliendo con sus compromisos".

Finalmente, el hombre de "Voy a ganar" se presentó en la ciudad jardín con un destacado show.

https://youtu.be/1D_iHVACGRQ