Fue más o menos así: Se dice que Yuridia Valenzuela descansaba en su habitación del hotel Miramar cuando por las pantallas de un canal de televisiónl vio por primera vez a Rodrigo Espinoza. El chileno, quien por esos años era el vocalista de Aleste, la banda sensación del verano, se presentaba la misma noche que la intérprete de la "Maldita Primavera".
La voz detrás del one hit wonder "Hay un límite que rompe el deseo" tenía 22 años en esos tiempos, una década menos que la estrella pop mexicana del momento. Pero el amor no tiene edad y la música no tiene barreras, provocando que la brisa del mar que rondaba por la Quinta Vergara, fuera el escenario de un romance internacional.
https://www.youtube.com/watch?v=xeaMYz1vxQY
Para la prensa rosa de la época, este vínculo amoroso fue una verdadera sorpresa. En conversación con Don Francisco en 2017, Yuri reveló detalles de cómo se concretó esta historia que terminó con argollas y la adopción de una niña en junio del 2009. Fue la mujer que tomó la iniciativa de conocer al cantante, quien le envió una foto con el mensaje de que quería conocerlo. Si bien la distancia era un problema, el amor fue más fuerte.
Alfredo Alonso, guitarrista de Aleste y amigo de Rodrigo, jamás esperó que el cantante abandonara el grupo para seguir a Yuri a Centroamérica. Según él, "nadie pensó que iba a ser tan largo, esto en algún momento pasa y todos decíamos: ¿por qué se va a separar el grupo por algo que va a durar tan poco? dijo Alonso en entrevista con Cooperativa, recordando el motivo del quiebre de la banda que deslumbró a la juventud chilena con su innegable sonido pop.
El Festival de Viña es la cuna del amor entre Yuri y Rodrigo y, tras 16 años lejos de la ciudad jardín, en la edición del 2011 la mexicana regresó al certamen con su pareja. En esa ocasión ambos compartieron escenario dando vida a la canción que permitió a Espinoza conocer a la mujer de la que jamás se volvería a separar.
https://www.youtube.com/watch?v=XSO8srqFSFc
