La campaña de Jani Dueñas para conocer a Dave Grohl

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Ocurrió en 2012, para la segunda edición de Lollapalooza, cuando el hombre de "The pretender" vino a Chile con su banda Foo Fighters.


Fanática del grupo formado en Seattle, la actriz y comediante se tatuó el título de una canción de Foo Fighters —"Everlong"— en uno de sus brazos.

"Me hice la palabra 'everlong' en la muñeca simplemente porque me gustaba mucho Foo Fighters y también esa canción, o sea, sigue siendo una de mis canciones favoritas heavy, aunque también me lo hice porque me gusta mucho la palabra, que es inventada, que textualmente no significa nada, es como decir 'para siempre mucho rato' o 'todo el tiempo'. Se trata de una palabra que no tiene traducción al castellano, entonces la encontré muy linda", contó al sitio dolordulcedolor.com.

En 2012, cuando supo que la banda de Dave Grohl visitaba Chile para la segunda versión del festival Lollapalooza, comenzó una campaña viral para conocerlo.

Fue en el sitio paniko.cl, en donde publicó una serie de virales —donde también participa la periodista Carola Gutiérrez— con el hashtag #janimeetsdave:

https://www.youtube.com/watch?v=AGgNgqtjPKk

https://www.youtube.com/watch?v=OfDVU382Jq8

https://www.youtube.com/watch?v=xCFeMhqG-gs

https://www.youtube.com/watch?v=_hvavy1qmCo

Allí también desclasificó su primer encuentro con la música del ex baterista de la etapa con más luces y focos de Nirvana:

Vomité apenas crucé la puerta de mi casa en un post titulado (muy adecuadamente) 'Un día de mierda'. Sé que mostrarle tus diarios de vida al hombre que amas puede ser riesgoso, pero ya te darás cuenta de por qué lo hago.

…estoy empezando a aburrirme, estoy empezando a perderme, estoy empezando a no ver nada. Sólo me achico cada día más a punto de abandonarlo todo. Escucho en el camino a casa:

I´ve got another confession my friend, I´m no fool. I´m getting tired of starting again somewhere new… were you born to resist, or be abused?

Y pedaleo cada vez más fuerte y más rápido, me bajo más la visera del gorro y así no miro a la gente que me esquiva por la vereda. Parece que vuelvo a ver luces y la sangre corre por dentro como un motor furioso.

Pero no. Sólo dura lo que dura Dave Grohl en mis oídos. Ahora llego a casa y ya no me creo. Me sirvo un vaso con ron, hielo y cocacola, me fumo tres cigarros al hilo y me quedo ahí. Esperando que mañana pase algo que haga que todo sea distinto.

Eso escribí.

No me mires así, ya sé lo que estás pensando. Puta que era emo, por la chucha. Y sí, mis problemas con el alcohol vienen de ese tiempo, ahora lo sabes, ya puedes dejar de preguntarte por qué siempre quiero que vayamos a bares. En fin.

Ese fue nuestro primer momento, Dave. Nunca olvidé ese momento. Nunca olvidé que me hiciste recorrer cuadras y cuadras movida por la fuerza de tu voz. Que parecía que me cantabas a mí, o mejor, que cantabas desde mí. Y esos momentos, cuando uno siente que una canción habla por uno y describe exactamente cada una de tus emociones, esos son los momentos que valen.

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Finalmente, el desenlace no fue el esperado.

Jani Dueñas, que se presenta por primera vez como comediante en el Festival de Viña del Mar, no conoció a su ídolo.

El día de su debut en Chile Dave Grohl, el cantante y guitarrista de Foo Fighters, cerró con éxito de público la última noche de Lollapalooza con un show de veintitrés canciones.

La última, como suele ocurrir en sus presentaciones, fue "Everlong".

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