No solo de estrenos vive el teatro chileno. Muy por el contrario: se ha vuelto habitual ver segundas y terceras temporadas de obras que pasaron fugazmente por la cartelera local. Dicha persistencia de los creadores ante el estrecho calendario de las salas, se ha traducido además en trabajos cada vez más pulidos y en que sus públicos se diversifiquen y suban como la espuma.
Tal parece ser el caso de Viejos de mierda, la exitosa comedia escrita y dirigida por Rodrigo Bastidas que, tras su estreno en septiembre de 2016 en el Teatro San Ginés, ha brincado a otros y diversos escenarios, como casinos y gimnasios de todo el país. Con 85 mil espectadores en la temporada pasada, la historia e irónica mirada sobre la vejez, con Coco Legrand, Jaime Vadell y Tomás Vidiella, volvió a consagrarse como la obra más vista del 2018 -tras conseguirlo un año antes-, y durante este mes volvió al Teatro Nescafé de las Artes y, hasta ayer domingo, para retornar en mayo al Municipal de Las Condes.
Al mismo escenario de Manuel Montt volverá también, el 14 de marzo, Morir de amor, la exitosa comedia musical de los Contadores Auditores (Juan Andrés Rivera y Felipe Olivares) que convocó 22 mil espectadores en 2018. Con un playlist ochentero, interpretado en vivo y con canciones de Juan Gabriel, Emmanuel y Yuri, entre otros, la historia de amores y engaños tendrá, en esta temporada, a la actriz Emilia Noguera en el rol protagónico, en reemplazo de Antonia Santa María.
El ciclo Lo Mejor de GAM, por su parte, repondrá dos exitosos montajes del año pasado. De un lado está Idomeneo (6 al 31 de marzo), texto del dramaturgo alemán Roland Schimmelpfennig que reescribe la tragedia del rey de Creta, y que la directora Manuela Infante convirtió en un concierto hablado y electrónico. Sobre el escenario, cercado por una parrilla de luces, están Paulina García, cuya voz conduce el relato, y Diego Noguera.
Del 13 al 31 de este mes, en tanto, Alfredo Castro y Rodrigo Pérez volverán a protagonizar Los arrepentidos, del sueco Marcus Lindeen, un diálogo entre dos hombes transexuales que echaron pie atrás en su decisión de cambiar de sexo. Con dirección de Víctor Carrasco, el montaje fue visto por 8.870 personas en 2018.
Clásicos y apuestas
Dos de los dramaturgos estadounidenses fundamentales del siglo XX vuelven también a escena. El director Alvaro Viguera repondrá entre el 28 de marzo y el 7 de abril, en el Municipal de Las Condes, su versión de Todos eran mis hijos de Arthur Miller, un drama familiar de la postguerra con un elenco encabezado por Cristián Campos y Coca Guazzini.
El atormentado matrimonio de George y Martha, protagonistas de Quién le teme a Virginia Woolf de Edward Albee, llega nuevamente a su sala de estreno, el Mori Bellavista, del 7 al 17 de marzo, bajo la dirección de Pablo Halpern y con las actuaciones de Willy Semler y Solange Lackington.
Mientras, a su sala del Parque Arauco arribará Tribus (14 al 17 de marzo), de la británica Nina Raine. Dirigida por Manuela Oyarzún y protagonizada por Mateo Iribarren, Tamara Acosta y Pablo Manzi, el texto retrata a un joven sordo que intenta hacerse oír al interior de su variopinta familia, que es incapaz de oírse. El subtítulo "Ver y no ver" de la obra Molly Sweeney, del dramaturgo irlandés Brian Friel, alude también al coraje de la protagonista de su historia, que se inspira en un caso clínico real analizado por el neurólogo Oliver Sacks: interpretada por la actriz Alessandra Guerzoni, una mujer que ha vivido en la más absoluta oscuridad desde su niñez, decide operarse ya casada y para ver todo aquello que la rodea. Pero las cosas no resultan como las esperaba. El montaje dirigido por Omar Morán debutó en CorpArtes en 2018, y entre el 21 de marzo y 31 de abril subirá a las tablas del Parque Arauco.
La ola de reestrenos alcanzará también a otras salas de Santiago: el reinaugurado Teatro La Memoria repondrá Fe de ratas, la comedia escrita y dirigida por Alexis Moreno y su compañía La María, con que abordan los abusos al interior de la Iglesia. Por su lado, el Teatro Finis Terrae pondrá nuevamente en escena La secreta obscenidad de cada día de Marco Antonio de la Parra, a 35 años de su estreno. Cierra la oferta la aplaudida obra Prefiero que me coman los perros (14 al 31 de marzo en Matucana 100), de Carla Zúñiga y conducida por Jesús Urqueta. Nona Fernández interpreta a Eugenia, una atormentada parvularia que hace diez años le provocó la muerte a uno de los niños que cuidaba. Ahora intenta expiar sus culpas sobre el diván, frente a su sicóloga.