La gente se agolpaba en un rincón del matadero Franklin. Ahí, entre piernas de pollo, longanizas y cabezas de chancho, Álvaro Henríquez decidió rodar el video promocional de "Mátame", uno de los sencillos de su álbum solista homónimo.

Un breve registro disponible en Youtube muestra la previa. Cuecas, rancheras y hasta algunas cumbias —bailadas con entusiasmo por un discípulo de Baco— fueron interpretadas por la banda de acompañamiento. Un homenaje a la raíz popular del lugar, pero también, a la diversidad sonora que el penquista plasmó en su aventura en solitario.

Si algo caracterizaba el trabajo lírico del compositor en sus anteriores proyectos, era su constante juego con el significado de las palabras —"Traje desastre" es un buen ejemplo—. Pero en su versión 2004, no estaba para rodeos. "Por tu culpa dejé pedazos/ inviernos crudos y no veranos/ si me hubiera dado cuenta antes/ no estaría tan mal", lanza.

El músico por entonces vivía un difícil momento. "Todas las cosas malas me pasaron al mismo tiempo: se acabaron los Pettinellis, me separé, lo de mi papá había sido hace poco [falleció en 2001]. Pero después que te ponís a pelear contra el mundo, viene junta toda la felicidad", detalló a Rolling Stone en diciembre de ese año.

https://www.youtube.com/watch?v=5NpwuWT2Q_I

Esa sensación de hastío es lo que marca el tono de diatriba del tema. De allí que, como una metáfora visual, el clip sea introducido por el ruido seco de una sierra al cercenar, limpia y rápidamente, un trozo de carne. Una cucharada alivia el dolor.

Creer en la amistad

Ese sonido da paso al acorde de Mi menor que toca en la guitarra Rickenbacker un invitado: Joselo Rangel, de Café Tacvba. Su participación en el video ocurrió casi de casualidad. Esa temporada vino con la banda al Festival de Viña, ocasión en que consiguió las Antorchas de plata y oro. Pero luego se quedó.

En esos días se unió a Henríquez para abrir el show de James Brown en la Quinta Vergara —ocasión en que tocaron "Esa noche", de los Tacubos—. Además le acompañó en el rodaje de "Mátame" y aprovechó de grabar en Estudios del Sur un segundo elepé en solitario, con el ex Pettinellis de productor, al que tituló Lejos.

"Le gusta trabajar en vivo en vez de depender del Protools y las máquinas. Con Álvaro es hacer una canción, grabarla el número que sea necesaria hasta que esté bien, aunque signifique tocarla 40 veces", contó el mexicano a Culto.

Además de Joselo, en la grabación del tema participaron otros miembros de la agrupación azteca. El inlay original del largaduración detalla: Meme del Real en segunda voz, órgano y piano, Quique Rangel en bajo y el mencionado hombre de las seis cuerdas.

La relación de los músicos era de la larga data. Incluso un par de años antes, los hombres de "El baile y el salón" homenajearon a Los Tres en su EP Vale Callampa, en que destacó su revisión de "Déjate Caer".

Tal como se aprecia en el clip, dirigido por Boris Quercia, ambos guitarristas consiguen una refrescante sintonía al tocar juntos. Según Rangel, sus lenguajes musicales son similares, y eso los hace cercanos. "Las guitarras de Álvaro son un sello muy fuerte. Él tiene el mismo gusto que yo, ese sentido melódico, de Johnny Marr, de los Smiths, una escuela que no es de solos sino de texturas", detalló.

Quercia es otro de los cercanos al creador de "Bolsa de mareo". Ambos coincidieron en el elenco de La Negra Ester a fines de los 80', uno como actor, el otro como integrante de La Regia Orquesta. Años después el penquista estuvo a cargo de la banda sonora del filme Sexo con amor, dirigida por el intérprete, donde destacaron el tema homónimo, y la composición instrumental para la recordada escena de la lavadora. Con esa canción, Pettinellis abrió su show en Viña 2004. Incluso el director se colgó la guitarra para tocar esa canción en el show que la banda ofreció en el Teatro Providencia.

En el making-off de la producción, mientras la gente aplaude y algunos dependientes de las carnicerías siguen la música, se ve a Quercia bailando con una de las asistentes, como si estuviera en una antigua Quinta de recreo perdida en algún lugar del tiempo.

El abrazo musical y la camaradería fueron un bálsamo en la hora más oscura de Henríquez. "Después de lo mal que lo puedes llegar a pasar, no queda otra que mirar para adelante. Que yo haya tenido decepciones y que me haya distanciado, seguramente para siempre, de mucha gente, no hará que deje de creer en la amistad, la lealtad o en todas las cosas en que siempre he creído, y que me enseñaron mis padres", confesó en la citada entrevista al magazine.

https://www.youtube.com/watch?v=YrkJrPJwMn8