Las miles de personas congregadas alrededor del VTR Stage, uno de los más grandes de Lollapalooza Chile, cantaron junto a Francisca Valenzuela verso por verso, canción por canción.
La cantante subió al escenario a paso firme en medio de fuertes aplausos que no hicieron más que aumentar al inicio de la primera canción: "Prenderemos fuego al cielo". Acompañada en principio solo de un piano, demostró sus dotes vocales que resonaban con fuerza. Sus bailarinas complementaron su canto con coreografías enérgicas que denotaban meses de preparación. Valenzuela prendió fuego a Lollapalooza.
Toda su presentación fue un vaivén de letras que jugaban con la seducción, el amor, la desilusión y la fuerza femenina. Se adueñó del escenario dejando en claro su posición como figura consagrada de la música chilena.
Si bien el recientemente estrenado "Tómame" redujo el apoyo del público, rápidamente repuntó con "Quiero verte más", tema en el que se sentó al piano bailando y cantando como si todo le resultara naturalmente. El goce era contagioso.
"Muchas tardes", dijo saludando al público, pero rápidamente se corrigió entre risas, "Estoy un poco nerviosa, no puedo hablar bien, muchas gracias Lollapalooza!!". Poco importó que trastabillara, el público se entregó por completo a los suaves acordes de "Afortunada".
De la balada romántica, pasó a un tema que llamaba a reflexionar: "El siguiente tema 'Catedral' no se refiere a la católica, sino a lo que es sagrado y especial para nosotros", y desde allí, saltó a la tragedia del desamor.
"Esta canción es sobre una relación tóxica", dijo en tono serio. Las miradas cómplices entre amigas, los gestos de emotividad en otras asistentes se empezaron a manifestar. "Esas relaciones de amor, amistad o familiares, que te hacen sentir inferior, y el momento en que te das cuenta que hay que decir 'chao'", dijo sobre "Ya no se trata de ti", estrenada en noviembre de 2018.
En medio de gritos que decían "mijita rica", Valenzuela sonrió y confesó que se arregló especialmente para nosotros, su público. Y es que el show reflejó estar construido cuidadosamente desde la elección del repertorio, las coreografías y la estética. Que Francisca se haya preocupado de "tener uñas presentables para tocar el piano", es uno más de los detalles a los que puso atención.
Violeta Parra se hizo presente a través del cover de "Run run se fue pa'l norte", coreado respetuosamente por el público. Y desde allí, la cantante chilena solo se defendió con sus grandes éxitos: "Dulce", "Peces", "Que sería" y "Buen soldado". Esta última, incorporando bailarines masculinos en vez de las chicas de rojo que la acompañaron desde el comienzo de su show.
El broche de oro llegó con el sencillo que da nombre a su disco debut, de corte más pop-rock que dice "No" a quien solo crea problema. Con "Muérdete la lengua" Francisca Valenzuela dijo adiós a su paso por Lollapalooza, dejando una marca color rojo vivo y reafirmando que es una de las reinas de la música chilena contemporánea.