Daenerys siente que lo ha perdido todo.
Jorah Mormont murió en la batalla de Winterfell, Missandei fue degollada frente a sus ojos, la mitad de su ejército pereció contra Euron Greyjoy, y su legitimidad como reina ya no es tal desde que se difundió que el verdadero heredero -respetando la línea sanguínea- es Jon Snow.
"No tengo amor aquí, solo miedo", le dijo Daenerys a Jon Snow. "Te amo, siempre serás mi reina", fue la respuesta, pero bastó un beso frío para que ella se diera cuenta que para Jon es difícil continuar como si no supieran la verdad. "Será el miedo entonces", responde la Madre de dragones, sintiéndose rechazada por el hombre que ama.
"Creo que cuando dice 'que sea miedo' se está resignando al hecho de que podría tener que hacer cosas desagradables, cosas horribles para mucha gente", explicó Daniel Weiss en Game revealed. "Eligió la violencia. Un Targaryen que elige la violencia es una cosa bastante aterradora", dijo el showrunner.
La guerra estaba ganada. Las campanas anunciaron que la ciudad se rendía ante Daenerys, pero la joven Targaryen decidió ignorar aquel sonido metálico y quemar la capital de todas formas. Después de todo, desde un principio dijo que tomaría lo que es de ella con sangre y fuego.
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Drogon quemando King's Landing por orden de Daenerys. Episodio 5 de la temporada 8: The bells.[/caption]
"No decidió con anticipación lo que iba a hacer", dijo Dan Weiss. "Luego ve la Fortaleza Roja, el hogar que su familia construyó hace 300 años cuando llegaron a Poniente, y es en ese momento, al mirar el símbolo de todo lo que le han quitado, cuando toma la decisión de hacerlo personal".
Gusano gris, su Comandante de ejército también dolido por la ejecución de Missandei, siguió el curso de acción de su reina y atacó sanguinariamente a los soldados Lannister que ya habían entregado sus espadas. Así mismo hicieron los dothraki que no distinguieron entre hombres, mujeres y niños.
Según los creadores de la serie, las reacciones frías a ciertas situaciones del pasado, eran un anticipo de lo que ocurrió en King's Landing. "Incluso cuando miras atrás, en la temporada 1, cuando Khal Drogo le da la corona de oro a Viserys, sabes que hay algo escalofriante en cómo reacciona al ver la cabeza de su hermano desaparecer", dice Benioff.
Viserys no era un buen hermano, los espectadores no lamentaron su muerte, pero la mirada gélida ante su trágico final, resulta extraña: "No era un verdadero drágon", dijo Dany ante aquella muerte.
Según Benioff, los sucesión de acontecimientos amparan la decisión final de Daenerys: "Si las circunstancias hubieran sido diferentes, no creo que este lado de Dany hubiera asomado nunca". De acuerdo a lo explicado por el showrunner, la soledad y frustración fueron las que transformaron a la "Rompedora de cadenas" en una sanguinaria.
"Si Cersei no la hubiera traicionado, si Cersei no hubiera ejecutado a Missandei, si Jon no le hubiera dicho la verdad... Si todas estas cosas hubieran sucedido de alguna forma diferente, no creo que estuviésemos viendo este lado de Daenerys Targaryen".