Más que los números alcanzados, la sorpresa con Avengers: Endgame se asocia a la velocidad con que llegó hasta cifras que la industria cinematográfica no conocía. Desde su estreno, el 25 de abril en cines chilenos, la superproducción ha batido un sinnúmero de marcas, en cierto punto esperables para la sucesora de Avengers: Infinity War (2018) y promocionada como el fin de una era para la mayor franquicia de superhéroes creada hasta ahora, con Iron Man y Capitán América al mando.
En el recuento a nivel mundial el filme registra US$ 2,62 millones, aún al acecho de Avatar, la más taquillera de la historia (US$ 2,78), en tanto en EE.UU. todo apunta a que se quedará segunda en el balance, debajo de Star Wars: El despertar de la fuerza.
Mientras, en cines chilenos ya celebra una marca que parecía destinada a cumplir desde antes de su debut, cuando rompió todo registro en la preventa y facturó más de 500 mil entradas sin siquiera haberse estrenado. Sellando otro logro inédito, antes incluso de cumplir su primer mes en cartelera la película superó los 2.336.000 espectadores de su predecesora y se convirtió oficialmente en el filme más visto del ámbito local, desde que se mide la taquilla cinematográfica y existen las grandes cadenas.
Actualmente, al completar su cuarta semana, la película ya va por los 2.840.000 espectadores y todo apunta a que en algunos días más se acercará a la barrera de los 3 millones. Un número antes impensado en la industria chilena y que fija un nuevo horizonte, ya muy lejos del año 2012, cuando el medio se sorprendía con una pareja de títulos llegando a los 2 millones (Stefan vs Kramer y La era de hielo 4).
Entre Avengers: Endgame y las antiguas número uno del circuito local, la mayor diferencia está en el tiempo que tardó cada una en batir el récord. Coco demoró casi cuatro meses, mientras que Avengers: Infinity War lo logró en seis semanas.
El reinado de la franquicia propiedad de Disney también se impone en el global del año en Chile: la segunda película más vista de 2018 hasta ahora es Capitana Marvel, con 1,3 millones de entradas vendidas. Y queda por delante un estreno del mismo universo: Spider-Man: Lejos de casa, cuya historia se ubica justo después del final de Avengers: Endgame y llegará el 4 de julio, en el mes de las vacaciones de invierno. Ese armado mancomunado de la saga, coinciden los expertos, es parte del secreto del éxito del llamado MCU y por qué se consolidó un fenómeno de tal envergadura.
Por lo pronto, la película más vista a nivel local ha visto disminuida la rapidez con que abulta sus cifras (producto de la entrada de títulos como Pokémon: Detective Pikachu y John Wick 3), pero sigue liderando la taquilla. Eso podría cambiar con el estreno de hoy: Aladdín, la nueva readaptación de un clásico animado de Disney, que aspira a superar los cerca de 600 mil tickets que ha vendido Dumbo, la quinta más vista del año, que vive sus últimos días en salas.
Las ganancias
En 2018 Avengers: Infinity War remeció la cartelera chilena y desbancó a Coco. Su cifra récord en espectadores se tradujo en una recaudación bruta de $9.054.135.123. Se considera que el precio normal de un ticket se mueve entre los $4 mil y $5 mil, dependiendo del cine, pero las promociones de cada cadena establecen que el promedio de la entrada sea menor.
En cualquier caso, exista o no una rebaja en el valor de la entrada, la ganancia de cada boleto se divide entre el exhibidor y el distribuidor.
Aunque puede variar y está sujeto a la negociación que se establezca entre ambas partes, fuentes de la industria comentan que en general la relación es de 60-40 a favor de la cadena de cine. En el mejor de los casos, quien lleva la película -y es dueña de los derechos- a las salas podría aspirar a una división de 50 y 50. Pero lo habitual es que a partir de la segunda semana, si el distribuidor negoció un 40%, este pase a ganar un 35%, hasta que la película salga de cartelera.
Ninguna de estas fórmulas incluye alimentos, parte esencial de un negocio que espera que el balance 2018 se atiborre de películas Disney. Junto a Aladdín, se apoderarán de la temporada más alta del año Toy story 4 (20 de junio) y El rey león (18 de julio). El segundo semestre, en tanto, debiera ser de Frozen 2 y Star Wars: El ascenso de Skywalker, el episodio final de la nueva trilogía de la saga.
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