No se trata exactamente de romper un cerco pero algo de eso hay en el séptimo álbum del quinteto capitalino que después de doce años de historia oficial se sigue acomodando, expandiendo y probando para hacer lo que les interesa hacer, que no es otra cosa que material artístico con sentido para sí mismos antes que el resto, costumbre que los instala fácilmente entre las bandas más originales surgidas en Chile en los últimos diez años. Cómo asesinar a Felipes encierra calidad, creatividad e ingenio indiscutidos, pero la música resulta áspera, dura, inaccesible si se quiere para el gran público. Abordan un abanico de hip hop, jazz y rock ácido sin guitarras desde un ángulo marcadamente masculino que en Naturaleza muerta, este nuevo episodio de su discografía, transgreden con la participación de Camila Moreno en un tema.

Felipe Metraca en batería y DJ Spacio en tornas y efectos, miembros originales junto a Koala Contreras en voz y Sebastián Muñoz en bajo, a quienes se sumó Cristián Gallardo en saxo alto y flauta traversa en 2016, son entrevistados ideales porque no parecen dispuestos a triangular las respuestas. Con quién grabarían del medio nacional y con quién no, las influencias, de dónde vienen esos samples característicos, cómo se trabaja con Billy Gould de Faith no more, tener a Chino Moreno de Deftones en el single "Disparan (fill the skies)", y la dificultad de reemplazar al piano y los teclados característicos de sus primeros discos. "Ya no queríamos otro tecladista", apunta DJ Spacio sobre ese quiebre radical en el sonido del grupo. "Y para que fuera entretenido el proceso de adaptarse pensamos esta solución de Cristián que está en una búsqueda musical bien parecida a la de nosotros. Y ese fue el sexto disco, que tenía un rollo bien cuático, una composición completa".

-Este disco también tiene un concepto.

Felipe: Sí, Carlitos (Meza, DJ Spacio) es el culpable porque le gustan mucho las películas. No concibe un disco si no tiene trama, nosotros no tanto. De hecho esta vez partimos con la idea de hacer canciones separadas.

-Las voces, las grabaciones, son características en ustedes.

DJ: Al principio era un poco más accidental, tratando de encajar la pieza. Ahora se trata más de una búsqueda por una temática que viene desde la letra para homogeneizar el mensaje de la narración, tratar de dejarlo explícito. A veces estaba muy camuflado. ¿De dónde lo sacó? Mucho de películas y ahora documentales. Sampleo como loco. Gracias Netflix.

-Si las letras y conceptos son más explícitos ahora, ¿qué quiere contar Naturaleza muerta? Me resalta la idea de una refundación de todo. Que estamos en una situación caótica pero existe una posibilidad. Pesimismo y esperanza a la vez.

F: Creo que al Koala eso es lo que le gusta.

DJ: Eso está presente en todos los discos y ahora se podría extrapolar a la naturaleza. A mí lo que me pasaba con el Koala es que siempre sonaba pesimista pero también las letras tienen su vuelta hacia algo positivo.

F: Koala siempre tiene un mensaje, y le gusta que cada uno interprete y le dé una vuelta con su rollo a las letras.

-Hablemos de las colaboraciones, primero Camila Moreno. ¿Cómo llegaron a trabajar con ella?

F: Somos bien de nuestro mundo y nuestro universo musical. Más allá de tocar con otras bandas pocas veces ha entrado gente y Camila era un personaje musical atractivo. Hay gente que nos ha dicho nuestra música es muy masculina.

-Cierto.

F: Por ese lado era interesante y como que ella nos pega más que la Ana (Tijoux) tal vez. Queríamos incluir a alguien que fuera por otro lado.

-¿Cómo se sienten con el resultado?

DJ: Lo que me gusta de hacer una invitación es que el resultado sea algo más de lo que tú ya tenías y con este tema pasó eso.

F: No la conocía personalmente y en el primer ensayo pensé que había que hacer un disco entero con ella. Me entusiasmé. Al escuchar la mixtura con el Koala, que no es una voz que les guste a todos, ni siquiera le gusta tanto a él, se mezclan bien. El resultado fue muy bacán y ella también fue muy capaz porque subirse a nuestra música tampoco es tan sencillo. Y resultó ser más cabezona.

DJ: Hay una parte donde nosotros estamos en 4/4, ella está en 5/4 y hay un instrumento que va 6/8. Si como músico estás tratando de contar cómo va, concha de tu madre. Eso es difícil de hacer.

-Cuando he visto a Camila cantar como invitada en vivo rara vez pega. Sin embargo resultó muy bien con ustedes.

DJ: No me veo con Francisca Valenzuela o con Javiera Mena.

F: No conozco mucho su discografía y sus participaciones con otra gente. Pasa que el Koala es súper intuitivo y él la trajo. No tiene conocimientos musicales pero tiene ideas. No siempre propone cosas pero cuando lo hace lo sigo.

-Tiene gusto.

F: Pero no siempre lo manifiesta.

-Quizás se amedrenta con ustedes porque igual son músicos capos.

DJ: No creo que amedrentado sea la palabra (risas).

F: Cuando estoy componiendo una canción sé si le va a gustar o va a quedar instrumental. Le gustan las métricas irregulares. Él no tiene una manera cuadrada de cantar tampoco.

-Sus canciones provocan esa sensación, distintas velocidades en forma simultánea. Algo parecido a lo que sucede con Meshuggah.

F: Me encanta.

DJ: Le copiamos todo a Meshuggah (risas).

F: Soy fan. Muchas veces cuando estoy componiendo pienso en ese tipo de bandas más que hip hop y cosas así.

-¿Cómo sucedió la colaboración con Chino Moreno?

F: Eso fue por el Billy (Gould). Empezamos en 2010 a trabajar con él. Tiene un pequeño sello independiente que más que apoyos económicos se preocupa de lo artístico. Mezcla los discos, viene y toca con nosotros.

DJ: Y está a otro nivel de contactos.

-Eso les iba a decir. Debe conocer mucha gente.

F: Exacto.

DJ: Mucha gente lo respeta también.

-Un excelente bajista subvalorado.

DJ: No se cacha mucho pero en Faith no more la mayoría de las composiciones son de él. Es un organizador también. A nosotros nos ordenó un poco, hacia dónde apuntar.

F: Después de todo lo que hemos hecho con él, dos veces en su estudio en San Francisco grabando, era como qué más. El año pasado tocamos en Lollapalooza y luego el festival Rec en Concepción. Y cuando estábamos en camarines... lo veníamos hablando, qué hacer en un nuevo disco. Entonces, si Billy era de los 90 en Los Ángeles y San Francisco, pensé 'este hueón debe conocer un montón de músicos', y le pregunté por nombres para colaborar. Él antes nos había planteado hacer algo con Los Jaivas. Tanteamos un poco el terreno y es re complicado porque Los Jaivas es una burocracia gigante. Si ni ellos mismos han hecho música nueva, imagínate invitarlos a un disco nuevo.

DJ: Había que tramitar en Chilecompra (risas).

F: Nos encantan Los Jaivas, pensaba que podía ser increíble, pero bueno, en Concepción le insistí a Billy pensando en Zach de la Rocha o en alguien de Cypress Hill. Él me dio algunos nombres. Habló de Corey Taylor de Slipknot, Tom Araya de Slayer. Y mencionó a Eddie Vedder.

-¿Les gusta Pearl Jam?

F: A mí me gusta pero a otros de la banda no tanto.

-¿Y Deftones?

DJ: Es un gusto compartido. O B-Real de Cypress Hill.

F: Nos encanta Deftones. Eddie Vedder era mucho, como meterse con la Coca Cola, algo demasiado grande. Y nosotros tampoco tomamos pasos por decisiones comerciales. Siempre debe tener algo artístico, si no dejaríamos de ser nosotros. Es un poco nuestra gracia. Cuando recién nos pusimos a trabajar con Billy el disco siguiente era Comenzará de nuevo, y había muchos periodistas que esperaban que diéramos un golpe, y nosotros hicimos un disco con canciones de 9 minutos porque estábamos escuchando Tool, rock progresivo. Eso queríamos hacer.

DJ: Y porque también dijimos váyanse al carajo.

F: Le dije a Billy que nos encanta Deftones, dijo que le iba a escribir al toque a Chino, y nos pusimos en contacto. Le mandamos una maqueta y la letra que escribió el Koala traducida. Justo vino Deftones a Chile cuando estábamos haciendo esa canción y nos juntamos. Al otro día nosotros viajamos al Primavera Sound pero calzó un día y nos invitaron a un concierto. Chino nos dijo que le gustaba mucho la letra y contó por dónde se iba a ir él. Compartió con el Koala y hablaron de eso.

-¿Quedaron conformes?

F: Me gustó.

DJ: Tiene toda la onda.

F: Tratamos de encauzar pero no somos de dar muchas directrices. Es una de las gracias de la banda. No hay alguien que esté mandando. Es bien libre y con Chino fue igual. El Billy nos ordena un poco. Dijo acá canta el Koala, acá canta tú.

DJ: Igual lo cortamos hueón (risas).

F: Le mandamos el resultado al Chino y le gustó también. Uno debe entender también que está lidiando con estrellas.

-¿Cómo era el tipo para trabajar?

F: Súper profesional pero también tiene una personalidad. Es súper artista.

DJ: Más artista que la chucha. Está en otro nivel de la fama.

-Es carismático.

F: Estábamos antes del show atrás todo muy piola, conversando, y después nos fuimos a ver el show y lo ves salir y claro, se lleva todas las miradas. Energía pura.

Fechas.

-¿Qué viene ahora?

F: Lanzamos el disco el sábado 13 en la sala Metrónomo, que era el teatro Belloni en Bellavista. Después nos vamos de gira al sur de Chile y también a Valparaíso. En noviembre a Europa. Por esta relación con el Billy nuestra llegada es por los Balcanes en Rumania. Él tiene mucha conexión con Serbia y Bosnia, fue para allá cuando estaban en guerra. Encuentra que se parecen mucho a los chilenos y efectivamente en Rumania son como los chilenos. Fuimos de gira el año pasado por primera vez.

-¿Cómo reaccionó la gente ante su música?

DJ: El tour lo hicimos completo con una banda rumana de metal que se llama Coma, muy parecida a Deftones. Tenían ene público. La gente vacilaba todas las canciones. No te voy a decir que las cantaban pero funcionó súper. Tocamos nuestras canciones más rockeras y todo bien.

F: En esos países están un poco alejados, no les llega tanta música. Aunque estén en Europa no todas las bandas pasan por ahí.

-Es el lado B de Europa.

F: Sí, y ellos se sienten lo peor de lo peor. Son como Chile en los 80. Viene una banda de afuera y ellos dejan la cagá.

DJ: Alucinan con que vaya gente de otro lado.

-¿Y alcanzaron a conocer el país?

F: Sí porque hicimos una gira por tierra en una van. Dimos la vuelta entera. Fuimos hasta el castillo de Drácula.

-¿Salva?

F: Por fuera está bueno.

DJ: Es todo muy turístico. Lo que pasa es que el choque cultural ahí tiene que ver con las influencias porque estos huevones no tienen mucho que ver con el resto de Europa. Son como medios rusos. A nosotros nos gusta la estética soviética, la cultura y el sistema soviético. Era raro estar ahí después de haber viajado mucho a Estados Unidos, incluso Latinoamérica, donde toda la cultura es media gringa. Allá en Rumania hay huellas escritas en cirílico. Hasta los garabatos te impresionan. Dicen cosas como me voy a culear al feto de tu mamá muerta. Ese era el equivalente al ándate a la chucha. Nos impresionó la relación que tenían con la muerte y las influencias culturales, no cachai influencia gringa. Era bien particular. Pensai en Europa y piensas París, huellas multiculturales, y esto no lo era.

-¿Terminan este disco y siguen componiendo?

DJ: Está el estrés de tocarlo porque nos tiene que salir tal como lo grabamos. No hay pistas sino hacer lo mismo que se grabó. Después de eso empieza el próximo disco de inmediato. Se libera la mente y hay que ver qué hay de nuevo.