Museo de Cera abre sus puertas tras los retoques

Unos pasaron por la peluquería, otros por el sastre. La poeta y premio Nobel Gabriela Mistral, y el animador Felipe Camiroaga, fueron algunas de las esculturas retocadas para la inauguración del Museo de Cera de Las Condes, que ayer abrió sus puertas en el Pueblito Los Domínicos tras dos semanas de retraso.

El espacio de 600 metros cuadrados y hoy habitado por 36 figuras de cera -desde políticos y exponentes de la cultura y el espectáculo, hasta deportistas y otros-, es el primero en su tipo en el país, y lo coordinará la Corporación Cultural de Las Condes y su director, Francisco Javier Court, y la Corporación de Educación y Salud de la comuna.

El recorrido lo abren diez presidentes, como José Joaquín Prieto y Pedro Aguirre Cerda (quien luce su piocha original), hasta los más recientes: Patricio Aylwin, Eduardo Frei Ruiz-Tagle, Michelle Bachelet y Sebastián Piñera. Ricardo Lagos y Salvador Allende no fueron incluidos.

Le siguen seis esculturas de personajes históricos, entre ellos Pedro de Valdivia, José Miguel Carrera, Bernardo O'Higgins y Arturo Prat. Los actores Héctor Noguera y Delfina Guzmán, el poeta Pablo Neruda y San Alberto Hurtado, son también parte de la muestra a cargo del artista Rómulo Aramburú. Un mes atrás, su trabajo fue tildado de "vulgaridad en su expresión más bizarra" por la Sociedad de Escultores de Chile.

El museo incluye también material interactivo: hay trivias sobre los personajes, y algunos están acompañados de registros audiovisales, como el periodista Julio Martínez, de quien se oye su recordado discurso de la Teletón de 1978: "Un canto a la vida, un canto a la dicha, un canto al amor".

La escultura de Stefan Kramer, quizá la más criticada, no se exhibió ayer. "Aún se encuentra en cirugía, pero será devuelta para la segunda tirada", dijo el alcalde Joaquín Lavín. En su lugar se instaló la de Bombo Fica. Otras nuevas verán también la luz en seis meses: Lautaro, Caupolicán, Inés de Suárez y Tonka Tomicic.

Otro ausente fue Don Francisco. "Todo esto requiere de una autorización y de que ellos mismos quieran estar aquí, pero este y otros nombres están considerados a futuro", concluyó Lavín.