"¿Cómo se le dice no a Dios?". Aquella es la pregunta que constantemente se hacía una de las nueve mujeres que denunció al tenor Plácido Domingo por acoso sexual en un reportaje publicado ayer por la agencia de noticias AP. La interrogante tiene que ver con la manera en que ellas debieron enfrentar los asedios de quien es considerado el hombre más poderoso de la ópera: un no como respuesta a Domingo significaba probablemente perder grandes oportunidades de trabajo.
El cantante español no es solamente el tenor vivo más importante, sino que fue director de la Opera Nacional de Washington desde 1996 al 2011 y desde el 2000 está al mando de la Opera de Los Angeles. Precisamente de aquellas dos casas líricas provinieron la mayoría de las denuncias relatadas en la nota firmada por Jocelyn Gecker.
Además de las nueve mujeres, de las cuales sólo una aceptó ser identificada, se recogieron testimonios adicionales de otras seis, que confirmaron la conducta acosadora de Domingo. De acuerdo a Associated Press, hubo también consultas a 36 testigos ligados al universo de la lírica, entre ellos cantantes, bailarines, músicos de orquestas y personal del backstage de escenarios de ópera. Lo que no hay son pruebas: ni textos, ni videos, ni audios.
Aunque el cantante lírico no respondió el cuestionario que se le hizo llegar a partir de las denuncias, sí emitió una declaración pública. "Las acusaciones de estas personas no identificadas, que se remontan hasta 30 años, son profundamente preocupantes, e inexactas tal como se describen", dice Plácido Domingo. Sin embargo, en ningún caso niega las denuncias, aunque prefiere darles un matiz a su manera: "Es doloroso saber que puedo haber molestado a alguien o haberles hecho sentir incómodas, sin importar cuánto tiempo haya pasado y pese a mis mejores intenciones. Yo creía que todas mis interacciones y relaciones fueron siempre bienvenidas y consensuada".
También busca explicar su conducta dentro del contexto de época. "Reconozco que las normas y estándares por los que se nos mide hoy -como debe ser- son muy diferentes de lo que eran en el pasado. ..Me atendré a los estándares más altos", afirmó Domingo, quien está casado hace 57 años con la soprano mexicana Marta Ornelas.
Con 78 años y una presencia constante en los más importantes escenarios del mundo, Plácido Domingo tiene entre sus récords haber participado del disco Los tres tenores, el más vendido en la historia de la música clásica, y ofrecer más de 4 mil presentaciones de ópera, más que cualquier otro cantante.
Con nombre y apellido
La única mujer que se identificó entre las denunciantes fue la mezzoprano Patricia Wulf, hoy de 61 años, quien cantaba regularmente en la Opera de Washington en los años 80.
Residente ahora en una granja en el estado de Virginia, Patricia Wulf proporcionó a AP fotografías de la época: en una aparece junto a Plácido Domingo, quien sostiene a una de sus hijas. La intérprete reconoce que cuando salía del escenariosolía incluso esconderse entre los pilares de la casa de ópera.
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La mezzosoprano estadounidense Patricia Wulf, hoy de 61 años, dice haber sido acosada por Domingo en los años 80.[/caption]
"Estaba entre bambalinas esperándome", afirmó. "Se pegaba a mí, todo lo cerca que podía, ponía su cara directamente junto a la mía, bajaba el tono de voz y decía, 'Patricia, ¿tienes que irte a casa esta noche?'". También recordó cómo lograba burlar al cantante para lograr salir del edificio: "Abría la puerta de mi camerino y miraba de reojo si es que él aún estaba en el pasillo. Si seguía ahí, no me quedba más que seguir esperando".
Patricia Wulf afirmó que un colega quiso interceder por ella y denunciar a Plácido Domingo, pero ella lo disuadió. "Claramente no iban a despedir a Plácido Domingo por eso. Por el contrario, a quien iban a echar iba a ser a mí".
Wulf sostuvo que había decido identificarse pues este "secreto a voces" había durado demasiado. Y agregó: "Estoy dando un paso adelante, porque quiero ayudar a otras mujeres a atreverse a hacerlo. O al menos a atreverse a decir que no".
De acuerdo a AP, la conducta de Plácido Domingo se fue haciendo tan conocida en el ambiente que incluso existían códigos de palabras entre las cantantes para alejarse de él. Uno de ellos era el "esquiva y agáchate", recurriendo a un término boxeril. Otro era simplemente "ríete y arranca".
En Chile, las dos cantantes que más relación profesional han tenido con Plácido Domingo son las sopranos Verónica Villarroel y Cristrina Galardo-Domâs, ninguna de la cuales quiso referirse a las denuncias contra el tenor español.
En enero del año pasado Plácido Domingo cantó en el Estadio Nacional en un concierto organizado por CorpArtes. Desde la Fundación, su directora ejecutiva Francisca Florenzano dijo a La Tercera: "Tengo la mas profunda convicción que si existe tan solo una denuncia formal de abuso, lo que corresponde hacer es investigar y que se sepa la verdad, más allá de quien sea el denunciado".
En cualquier caso, desde las casas de ópera y conciertos del mundo sí hubo ya respuestas por las palabras de las denunciantes. Las dos más graves, como era de esperar, provinieron de Estados Unidos, en la costa Este y en la costa Oeste. En la primera, la Oquesta de Filadelfia retiró la invitación que había hecho al músico para que cantara junto a la agrupación en la velada del 18 de septiembre. En California, en tanto, la Opera de San Francisco canceló la actuación que tenía prevista para el tenor el próximo 6 de septiembre.
En su propia casa lírica, la Opera de Los Angeles, también hubo una reacción. "La Opera de Los Angeles tiene sólidas políticas y protocolos de recursos humanos. De acuerdo con las mismas, va a obtener consejo externo sobre las acusaciones contra Plácido Domingo", se afirmó en un comunicado. En la Royal Opera House de Londres afirmaron que no tenían conocimiento sobre comportamientos cuestionables de Plácido Domingo, pero que de todas maneras su política de "tolerancia cero" los obligaba a revisar cualquier novedad al respecto.
La única reacción más favorable a Plácido Domingo vino desde el Festival de Salzburgo (Austria), donde su presidenta Helga Rabl-Stadler confirmó la actuación del cantante en la ópera Luisa Miller de Verdi los próximos 25 y 31 de agosto. La ejecutiva sostuvo: " Conozco a Plácido Domingo desde hace más de 25 años. Desde el principio me ha impresionado, junto a su capacidad artística, sus modos respetuosos con todos los trabajadores y trabajadoras del Festival".