Esta mañana se conoció la muerte del destacado fotógrafo Robert Frank, autor entre otros trabajos de The Americans.
Publicado originalmente en 1958, el libro está fuertemente influenciado por el periodo de la posguerra, y muestra desde una perspectiva moderna su visión escéptica y fresca de la sociedad estadounidense vista desde los ojos de un extranjero.
En 1955, el fotógrafo recibió un permiso especial de la Fundación Guggenheim para viajar a través de Estados Unidos, de costa a costa, de manera de fotografiar a la sociedad local en todos los estratos. Llevó a su familia con él en una serie de viajes de carretera durante los años siguientes, en los que disparó unas 28.000 fotografías. Solo 83 de estas fueron seleccionadas para The Americans.
En la edición estadounidense de The Americans, el prólogo está a cargo del escritor beat Jack Kerouac.
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Funeral en St. Helena, en Carolina del Sur, en 1955. Robert Frank[/caption]
Nacido el 9 de noviembre de 1924 en Zúrich, Suiza, en una familia de industriales judíos alemanes, Robert Frank se apasionó desde muy joven por la fotografía, trabajando en laboratorios en su ciudad y Basilea desde 1940. En 1947 se muda a Estados Unidos, donde trabaja como fotógrafo de moda y periodista para revistas como Fortune, Life o Harper's Bazar.
Hastiado, viaja primero a América Latina, luego a Europa, sobre todo a Francia, a París. En 1953, regresa a Nueva York. Rechazando los pedidos de revistas, obtiene una beca de la Fundación Guggenheim que le da la libertad de realizar su trabajo a su antojo. Será la aventura "estadounidense". En 1961, presenta su primer gran exposición en Chicago, que será seguida por muchas otras.
A pesar de todo, decide abandonar la fotografía para dedicarse el cine de vanguardia. Su primera película, Pull My Daisy, se estrenó en 1959 con Delphine Seyrig.
Los años 1970 son los de las pruebas: separado de su esposa, con la que tuvo dos hijos, se instala con la que será su segunda esposa en un rincón remoto de Nueva Escocia, en Canadá. Su hija muere en 1974 en un accidente aéreo en Guatemala, mientras que su hijo sufría una enfermedad mental (se suicidará a principios de los años 1990).
Esto no le impide desarrollar sus experimentos formales alrededor de la imagen. Realizará en total unas veinte películas (entre ellas cortometrajes y clips) inspiradas en el arte, el rock, la escritura, su hijo o el viaje, como This song for Jack (1983), Candy mountain (1987) o Paper route (2002).