¿Qué pasa si la mejor película de Nolan o Taratino aún no se ha hecho? La mayoría de los grandes directores de Hollywood tienen uno o muchos proyectos que los apasiona y que aún no pueden o nunca podrán ver la luz. En el caso de Guillermo del toro, son demasiados como para nombrarlas todas y en otros casos, el proyecto que un director nunca pudo filmar, cobró vida en las manos de otro.

Darren Aronofsky's "Batman: año uno"

Ha coqueteado con varias películas que prometen ser un éxito de taquilla, ya sea Wolverine con Hugh Jackman o Watchemen antes de que Zack Snyder se quedara con el trabajo, pero la que aún hiere a los estapectadores es Batman: año uno. El año 2000 se anunció que Aranofsky dirigiría la adapatación del comic de Frank Miller, que el mismo Miller escribiría el guión y que Matthew Libatique, que comúnmente trabaja con Aranofsky, sería el director de fotografía.

Ya había logrado el éxito con Pi (1998) y Requiem for a Dream (2000), pero con Batman, haría su debut como director de estudio y nada menos que con el apoyo del gigante Warner Bros. La compañía quería dejar atrás el fracaso de Batman y Robin (1007), y le encargó llevar al superhéroe de vuelta al cine en gloria y majestad, pero por problemas de calendario, el director tuvo que aplazar el proyecto y con el tiempo, Warner decidió fichar a otro director. Dejó de ser Batman: año uno y empezó a tomar la forma de lo que sería la famosa Batman Inicia.

Christopher Nolan

Ha hecho algunas de las películas basadas en cómics más icónicas de la industria y otras que se han hecho famosas por desafiar todas las expectativas de la audiencia, pero hay una que a pesar de que no  se sabe si alguna vez llegará a los cines, se ha convertido en leyenda.

Nolan empezó a escribir el drama biográfico del magnate y cineasta Howard Hughes después del estreno de Insomnia (2002), la película con la que se hizo un nombre en Hollywood. "Es el mejor guión que he escrito", dijo en alguna oportunidad. Si la afirmación era real o una exageración, puede que nunca se sepa, porque la película no llegó a concretarse.

La pre producción ya había empezado, y Jim Carrey se perfilaba como el candidato estrella para el protagónico, pero Howard Hughes también había robado el interés de otro director muy famoso. Martin Scorsese estaba empezando a trabajar en El Aviador (2004) y tendría a Leonardo DiCaprio interpretando a Hughes. Nolan no quiso someter su película a una competencia ni comparaciones, así que abandonó el proyecto y aceptó la propuesta que le hizo Warner Bros de crear su propia versión de Batman.

Al final, todo terminó en paz: El Aviador ganó premios y aclamaciones y Batman inicia, es hasta ahora, recordada como la mejor película de superhéroes.

Patty Jenkins

Entre el largometraje Monster (2003) y Wonder Woman (2017) hay un lapso de 14 años, pero no porque Patty Jenkins lo quisiera así. Por algunos años no tuvo proyectos en sus manos y se dedicó a dirigir para series de televisión hasta que en 2014, Sweetheart apareció en sus planes. Trataba sobre la historia de una asesina a sueldo piensa dejar el negocio. Tendría tintes de comedia e incluso se rumoreó que sería interpretada por Charlize Theron, pero la producción no avanzó. Tiempo después se anunció que dirigiría Thor 2, pero por diferencias creativas terminó distanciándose de los estudios Marvel. En 2017, el estreno de Wonder Women terminó con la mala racha.

David Lynch

Empezó a desarrollar Ronnie Rocket poco después ganarse el reconocimiento con Erasherhead (1977). Se suponía que continuaría por el camino de éxito y lo que proponía, en ese entonces era la historia de un detective cojo que entra a otra dimensión y es perseguido por un enano que puede contralar corrientes de electricidad. Como era de esperar, a una película así le resultó imposible conseguir el financiamiento. Lynch dejó el proyecto en espera y se dedicó a The Elephant Man (1980), pero varias veces a vuelto a proponer a Ronnie Rocket e incluso ha llegado a las etapas iniciales de pre-producción, pero nunca más allá.

Martin Scorsese

Por mucho tiempo Martin Scorsese ha querido hacer una película biográfica sobre Dean Martin titulada Dino. En 1992 compró los derechos del libro escrito por Nick Toches con el mismo nombre y le pidió Nicolas Pileggi, con el que trabajó en Goodfellas (1990) y Casino (1995) que trabajara en el guión. En 1997, se decía que Scorsese estaba listo para elegir al elenco y según los rumores, Tom Hanks se quedaría con el papel de Martin y Travolta con el de Frank Sinatra; Hugh Grant, Adam Sandler y Jim Carrey tendrían roles secundarios.

El proyecto se atrasó por conflictos en el calendario y los dineros del presupuesto, así que Scorsese dedicó sus energías a Pandillas de Nueva York (2002) cuya producción terminó por alargarse. Cuando el director quiso retomar Dino, Warner Bros. lo había abandonado.

Lynne Ramsay

El western Jane's Got a Gun (2015) se estrenó sin pena ni gloria, pero el detrás de escena, se robó la atención de los sitios especializados por mucho tiempo. Era 2013 y en el primer día de filmación, los titulares anunciaron que la directora, Lynne Ramsay no había llegado a trabajar.

Había dos versiones de la historia que llegaron incluso a enfrentarse en la justicia. En un extremo, estaba el estudio, que decía que Ramsay había sido negligente en sus responsabilidades, tenía conductas abusivas con el elenco y no tenía suficiente precaución con las armas que se usaban en el set. En el otro, Ramsay se defendía diciendo que tenía diferencias creativas importantes con los productores, y les había advertido desde mucho antes que no estaba dispuesta a negociarlas.

Finalmente, ambas partes llegaron a un acuerdo legal pero la película terminó resultando muy distinta. Ramsay fue reemplazada por Gavin O'Connor y Natalie Portman se mantuvo en el protagónico, pero el resto de los actores importantes fueron reemplazados una y otra vez. Michael Fassbender iba a ser el protagonista masculino pero por los retrasos en la producción, fue reemplazado por Joel Edgerton y el papel del villano, pasó de Jude Law a Bradley Cooper hasta terminar siendo interpretado por Ewan McGregor.

Guillermo del Toro

Guillermo del Toro ha experimentado la pérdida de varios proyectos, pero como At the Mountains of Madness, la adaptación de la novela de H. P. Lovecraft era uno de los que más le apasionaba, quizás sea también la más devastadora.

La película empezó a desarrollarse de la mano de algunos pesos pesados como James Cameron y Tom Cruise como productores, un presupuesto de 150 millones de dólares y grandes efectos especiales. Todo marchaba hasta que Del Toro le advirtió al Universal que la película tenía que ser para mayores de 18. El estudio no estuvo de acuerdo,y respondió que sería calificada como para ver bajo responsabilidad de los padres o nada. Resultó en nada.

Quentin Tarantino

Las posibilidades de que Double V Vega llegue a ser estrenada son casi nulas. Sería una precuela de Pulp Fiction (1994) que juntaría a los hermanos Vincent Vega de Pulp Fiction y Vic Vega de Reservoir Dogs (1992), pero por la cantidad de años que han pasado desde el estreno de ambas películas, sería demasiado ambicioso pensar que John Travolta y Michael Madsen podrían volver a interpretar sus papeles. "Tenía clara la premisa y que tendría lugar en Amsterdam, en los años que Vincent dirigía uno de los clubs club de Marsellus Wallace. Vic lo visitaría y la película mostraría esos días, pero nunca llegué a decidir que les pasaría o en qué problema se meterían ", señaló este año a Cinema Blend.

El otro proyecto improbable de Tarantino es Killer Crow, la historia de un grupo de soldados negros que ha desertó de la guerra. Se desarrollaría en una línea temporal similar a Bastardos sin Gloria (2009), después de la invasión de Normandía. Sin embargo, si es que Tarantino cumple la promesa de retirarse después de la décima película, las probabilidades de que Killer Crow llegue a ver la luz, son pocas.

David Fincher

Fincher tiene varios proyectos sin hacer, pero Ness es uno de los que más cerca estuvo de hacerse realidad. Iba a ser la adaptación de la novela gráfica Torso y tenía a Matt Damon como Eliot Ness, el agente encargado de perseguir a un asesino en serie. Casey Affleck y Rachel McAdams estaban en negociaciones, pero la película murió porque el desarrollo se demoró mas de los esperado y Paramount perdió los derechos. La vida sigue y David Fincher superó el episodio con La red social.

20.000 leguas de viaje submarino es otro de los proyectos infames de David Fincher. Estaba desarrollándola para Disney, tenía un prespuesto millonario y hasta locaciones seleccionadas, pero nunca llegó mas allá: el estudio y el director no pudieron ponerse de acuerdo en el elenco. Mientras Fincher quería a Brad Pitt o Channing Tatum en el principal, Disney estaba decidido por Chris Hemsworth.

"Una vez que pasas los 200 millones de dólares, a las compañías llega la ansiedad corporativa. Hicimos una lista de personas para los protagónicos y llegamos a un acuerdo de dos o tres nombres con los que se sintieran cómodos, pero elegir a los secundarios, se volvió un esfuerzo insólito", señaló al medio Little White Lies

Spike Lee

Uno de los proyectos que apasiona a Spike Lee es Save Us Joe Louis,  un drama sobre la rivalidad entre un boxeador afroamericano y Max Schmelling, su rival alemán. En 2001, ya había un guión listo, pero el director se dedicó a 25th Hour e Inside Man. Seguía prometiendo que Save Us Joe Louis iba a ser filmada y en 2006 llegó a anunciarse a Terrence Howard como protagonista, pero Lee volvió a involucrarse en otros proyectos y Joe Louis aún no puede salir a pelear.

Sofia Coppola

Sofia Coppola se embarcó en una versión de La Sirenita que nunca llegó a puerto. Coppola no tenía interés en hacer una película familiar. En vez de rehacer la versión de Disney, Coppola quería enfocarse en los detalles sombríos que Hans Christian Andersen había imprimido en el cuento original.

La pre producción se mantuvo en marcha por un año, pero el presupuesto aumentaba y Coppola empezó a sospechar que la viabilidad del proyecto tambaleaba. Lo que ella proponía era demasiado: romper con la idea de sirena que predomina en el inconsciente colectivo y grabar la mayoría de las escenas bajo agua era arriesgado y caro. Como ninguna de las partes iba a ceder, la directora terminó renunciando, y el proyecto se mantuvo a la deriva por otro año, hasta que se hundió por completo.