En febrero de este año la inglesa Olivia Colman se ganó un puesto en los libros de historia de la industria del cine -o al menos alguna pregunta de trivia- cuando obtuvo el Oscar a Mejor Actriz por La favorita, interpretando de manera brillante a una descontrolada reina Ana. Tras ese papel, la artista vuelve a ponerse una corona, ahora para la pantalla chica, tomando la posta del papel de la reina Isabel en la tercera temporada de The Crown, estrenada hace una semana en Netflix.

Y aunque puede ser que para muchos este sea el segundo papel en que verán a Colman, esta brillante actriz lleva más de 15 años demostrando su talento en la TV, con series que todavía pueden ser vistas y que definitivamente vale la pena revisar.

Entre 2003 y 2015, ella apareció en gran parte de los capítulos de Peep Show, serie disponible en Netflix y que es una joya de la comedia británica. Protagonizada por David Mitchel y Robert Webb, sigue las vidas de dos patéticos amigos y compañeros de departamento, con la particularidad que lo hace siempre enfocando la escena desde el punto de vista de alguno de los que participa en ella y además mostrando lo que piensan.

Aquí la actriz interpreta a Sophie, que aparece primero como una chica algo tímida y bastante normal, compañera de trabajo e interés romántico de Mark (David Mitchell), aunque con el correr de los capítulos empieza a mostrar lados tan disfuncionales como los de los protagonistas.

Todavía estaba haciendo apariciones esporádicas en Peep Show cuando volvió a sorprender con un papel muy lejano al de esa poco feliz y poco equilibrada oficinista. Se trataba de la detective Ellie Miller en Broadchurch, espacio que estuvo disponible en el Netflix chileno y que de seguro a cualquier fan de las series criminales le gustaría volver a ver en ese u otro catálogo.

Colman y David Tennant (Doctor Who) se lucen como una dupla -a su pesar- de detectives que debe resolver el asesinato de un niño, un caso que tiene destrozado a un pueblo inglés, y haciendo que todos sospechen de todos. La ficción tuvo tres temporadas en que el procedimiento policial se mezclaba con las tribulaciones personales de sus protagonistas, personajes a veces quebrados e inseguros que le dan una humanidad distinta a la que podría haber sido una serie de "quién es el asesino".

Y como si no fuera suficiente con el Oscar, Olivia Colman también es parte del elenco de la comedia del momento: Fleabag, que tuvo dos temporadas y con la segunda arrasó en los últimos premios Emmy. La única y gran protagonista de esa historia es Phoebe Waller-Bridge, interpretando a una chica cuya vida parece estar fuera de control.

En ese contexto, una de las personas que logra sacarla de quicios es el personaje de Colman, la madrastra del personaje central. Y ahí aparece otra cara de la actriz, una mujer engreída y cínica, que dice los comentarios más hirientes con una sonrisa en la cara y se cree lo más interesante de la sociedad artística inglesa. Esta serie, disponible en Amazon, es un imperdible y una nueva oportunidad de ver actuar a Olivia Colman, sin duda una de las grandes intérpretes del momento.