Roland Emmerich (1955) es un niño. Gusta de jugar con alienígenas hostiles, naves espaciales, grandes reptiles y animales prehistóricos. Fueron los colosales protagonistas de filmes como Día de la Independencia, Godzilla y 10.000 A.C. También hace que el planeta Tierra colapse cada cierto tiempo (El día después de mañana y 2012 son sus hits al respecto) y su interés por los patriotas estadounidenses sólo es igualado por su debilidad por las películas con números (se hizo conocido en 1990 con Estación lunar 44).
En su nueva cinta, Midway: Batalla en el Pacífico, decidió jugar a lo que le faltaba: los soldaditos. Pero además volvió a recrear la historia de Estados Unidos tras El patriota, su película con Mel Gibson. Midway es una vigorosa y costosa superproducción que recrea la batalla que en cuatro días cambió el curso de la Segunda Guerra Mundial. Protagonizada por Woody Harrelson como el almirante Chester Nimitz y Dennis Quaid en el rol del vicealmirante William Halsey, la película retrata con lujo de detalles históricos y técnicos la carrera de Estados Unidos para contraatacar a Japón tras el desastre de Pearl Harbor en diciembre de 1941.
La Batalla de Midway se libró en el Pacífico Norte en junio de 1942 y significó la destrucción de cuatro portaaviones y un destructor de la Armada Imperial Japonesa. Tras esa derrota naval, el país jamás pudo recuperarse.
La película de Roland Emmerich fue filmada en Hawaii , incluyendo Pearl Harbor. Desde Berlín, el director más americanizado de Europa habla con La Tercera sobre el filme que ayer entró a salas.
¿Por qué le interesó esta historia?
Hace 20 años vi un documental sobre la Batalla de Midway y sentí la necesidad de hacer una película. Evidentemente había que contar la historia desde un principio. Es decir, teníamos que empezar por el ataque a Pearl Harbor y luego mostrar los seis meses que pasaron hasta Midway, cuando ganaron los americanos. Es la historia de un regreso con gloria, después del desastre de Pearl Harbor. Además, esta fue la primera y una de las pocas veces en la historia en que los estadounidenses eran los menos capacitados, inferiores en equipamiento en comparación a los japoneses.
¿Por qué no pudo hacerla en ese momento?
En la época en que vi el documental de Midway yo tenía un contrato con Columbia Pictures. A ellos también les interesaba, pero el costo era sobre los 100 millones de dólares. Hablé con el jefe de Columbia, pero su respuesta fue que los dueños de los estudios, es decir la compañía japonesa Sony, no querían gastar tanto dinero en un largometraje donde Japón perdía. Así es que en vez de Midway hice El patriota (1999) para Columbia. Finalmente hace unos cuatro llegó a mi oficina un joven guionista llamado Wes Tooke. Le pregunté qué quería hacer y me dijo que estaba listo para escribir la historia de la Batalla de Midway. Así es como empezamos a trabajar.
¿Por qué perdieron los japoneses en Midway?
Creo que el principal flanco de los japoneses fue su arrogancia. De alguna manera se creían invencibles en el mar y cometieron una serie de errores. Por el lado de los americanos, hay que reconocer que su capacidad de improvisación fue importante, pero también tendían a ser flexibles y confiar mucho en decisiones individuales de algunos de sus comandantes. Creo que hay al menos un par de cambios de libreto que decidieron la victoria para ellos.
En la película también se muestra a China controlada por Japón en la Segunda Guerra Mundial, ¿por qué?
En nuestra época, en medio del ascenso del nacionalismo, es necesario contar qué sucedió realmente en la Segunda Guerra. Y lo que pasó es que muchos murieron luchando contra el fascismo. Si uno hace un filme así, deber mostrar todo con el objetivo de que no vuelva a suceder. Los estadounidenses también tuvieron un gran nivel de víctimas fatales, considerando que entraron bastante después y que incluso no era en principio su guerra. Lo que buscaba Japón con su expansionismo era consolidar su poder económico. Por otro lado, Estados Unidos se dio cuenta en un determinado momento de que en este conflicto había que defender sobre todo la democracia.
Entonces Midway es también un filme sobre la democracia...
Sí, pero no pierdo de vista que ésta era una gran oportunidad de mostrar la batalla misma y de dejar en claro la importancia que tuvo en el descenlace de la guerra. Por un lado los japoneses peleaban con un gran sentido de adoctrinamiento, muy rígido.. Los estadounidenses, al revés, eran bastante prácticos. Pero, además, cuando filmamos pude comprobar lo poco que los propios estadounidenses saben de Midway. Todo el mundo está enterado de Pearl Harbor, pero la gran mayoría no sabe que seis meses después se decidió la suerte de Japón al ser derrotados por los americanos en esta batalla.
¿Por qué la Segunda Guerra Mundial sigue siendo tan fascinante para el cine?
En primer lugar, no ocurrió hace tanto tiempo, apenas entre 75 a 80 años atrás. Además, si lo simplificamos, fue una especie de batalla entre el bien y el mal: por un lado estaba el fascismo y en el otro bando se ubicaban las democracias. Eso, para las películas, siempre será una fuente inagotable de historias. Por otro lado, hay muchos filmes sobre la Primera Guerra Mundial que a veces no funcionan por la simple razón de que nadie sabe de qué se trataba el conflicto. En cambio, si es la Segunda Guerra, sabes exactamente en qué consisten las cosas. A fin de cuentas, lo que puedo decir de Midway es que traté de hacer la película de la forma más balanceada posible y no herir susceptibilidades de ninguna especie. Es muy fácil crear enemigos en este mundo.