Si ha vivido en el planeta Tierra en los últimos 50 años, es prácticamente imposible que no haya escuchado nunca una composición de John Williams. El músico nacido en Floral Park, a media hora de Nueva York, ha creado las bandas sonoras de algunos de los filmes más populares del cine contemporáneo, como Star Wars, Harry Potter, Indiana Jones, Jurassic Park y El Señor de los Anillos.
Nominado al Oscar por la música de Star Wars: El ascenso de Skywalker, a los 87 años es el compositor vivo con más postulaciones a los premios de la Academia: 52. El músico ya ha obtenido cinco estatuillas por sus trabajos en El violinista en el tejado, Tiburón, Star Wars: Episodio IV - Una nueva esperanza, E.T el extraterrestre y La lista de Schindler.
A ese reconocimiento en el mundo del cine se suma en forma creciente el de otro medio, más esquivo: el de la música clásica.
Hijo de un percusionista de jazz, John Williams estudió piano y composición en la Universidad de California. Antes de alcanzar celebridad con la música de cine, trabajó como pianista de jazz, y en 1960 Columbia Records lo contrató, oportunidad en que colaboró con el compositor alemán André Previn.
"En décadas pasadas, estaba de moda que los músicos autodenominados serios despreciaran a Williams, pero el corpus de Star Wars ha atraído cada vez más el escrutinio académico", anotó Alex Ross en la revista The New Yorker en 2018.
Uno de los admiradores de Williams es el venezolano Gustavo Dudamel, director artístico de la Filarmónica de Los Angeles. En 2015 Dudamel dirigió la banda sonora de Star Wars: el despertar de la fuerza, a pedido del propio compositor. Y en 2019, publicó un disco doble en homenaje a Williams.
El año pasado, al menos 13 grandes orquestas de EEUU interpretaron las partituras del músico, desde Washington a Nueva York. En nuestro país, la Filarmónica ofreció un ciclo dedicado a Williams en diciembre en el Municipal, y la Sinfónica de Chile también tocará sus melodías hoy en el Teatro Caupolicán.