Tras la inesperada muerte de Chris Cornell, el 18 de mayo de 2017, un nuevo foco de conflicto se abrió entre su viuda, Vicky Cornell, y sus excompañeros de Soundgarden. Una disputa que se mantuvo bajo cierto hermetismo pero que se agudizó y se volvió más visible en las últimas semanas, luego que se conociera la demanda que presentó la esposa del vocalista contra los otros tres músicos de la banda, por no pago de derechos.
Vicky Karayiannis -su nombre real- acusa a Kim Thayil, Matt Cameron y Ben Shepherd de retener miles de dólares en regalías que deberían ser pagados a ella y a sus hijos, así como de forzarla a ceder los derechos de siete canciones inéditas que su marido grabó antes de su muerte, las que serían parte del álbum que los integrantes de Soundgarden pretenden publicar. Además, ha pedido tener más injerencia en el proyecto.
Según TMZ, los documentos presentados en la demanda señalan que estos siete demos fueron "compuestos únicamente por Chris, con sus pistas vocales, que forman parte de su legado". Karayiannis señala que su intención es publicar los temas en "la forma que Chris hubiera querido", pero que el grupo se ha negado pues intentan de manera legal "forzar a los encargados de sus bienes a que entregue dichas grabaciones".
Ante esto, los sobrevivientes de Soundgarden enviaron una carta donde argumentan que "junto a Chris habíamos estado trabajando en las pistas en un esfuerzo colaborativo", y que "algunos coautores realizaron su aporte en cinco de las siete grabaciones", lo que, según ellos, los involucra en la repartición monetaria.
El último episodio de esta historia lo firmó el baterista Matt Cameron, quien en redes sociales dejó en claro que el inédito séptimo álbum de la banda, que comenzaron a trabajar hace casi un lustro, verá a la luz tarde o temprano. "Nuestro legado musical no tiene nada que ver con el juicio con Vicky Cornell. Publicaremos el último disco de Soundgarden y mucho más", aseguró.
Amor y patrimonio
Lo ocurrido en el entorno de Cornell es el más reciente caso que pone en disputa a las viudas de las leyendas del rock con sus excompañeros o con compañías discográficas, en conflictos de patrimonio, control de derechos autorales o lanzamientos póstumos. Algunos con resultados más favorables que otros.
Un caso emblemático es el de Priscilla Presley (74), actriz, empresaria y exesposa de Elvis Presley, además de la madre de su única hija, Lisa Marie. Si bien se separaron en 1973, cuatro años antes de la muerte del Rey del Rock, Priscilla Presley es la presidenta de Elvis Presley Enterprises (EPE), corporación que administra diversos bienes del legendario artista además de una parte del legado de su cancionero.
EPE es, de hecho, la entidad a cargo de Graceland, la emblemática mansión que Elvis compró en Memphis, así como la responsable de convertir el recinto en uno de los principales atractivos turísticos de Estados Unidos, con cerca de 600 mil visitas por año y constantes exposiciones y homenajes dedicados al artista.
Si bien el sello RCA -hoy propiedad de la multinacional Sony- es dueño de las grabaciones de Elvis Presley, y controla los lanzamientos y recopilaciones de su catalogo, EPE es propietaria de las canciones mismas.
Quien también ha luchado por diferentes causas que tienen que ver con los derechos de imagen de su fallecido esposo es Yoko Ono (86). Ella es propietaria de un íntimo material audiovisual en el que John Lennon aparece en Londres junto a su familia, de 1970, video que finalmente no vio la luz ya que Ono ganó el juicio por derechos de autor a la empresa World Wide Video LLC, empresa que quería difundir dicho material.
En 2017, además, Ono fue reconocida oficialmente como coautora de "Imagine", el icónico himno solista del exBeatle, por parte de la National Music Publishers Association (NMPA).
Más involucrada en el catálogo de su difunto esposo ha estado Olivia Arias, escritora, productora y viuda de George Harrison. Ella organizó el tributo al exBeatle en el Royal Albert Hall, en 2002, y ha supervisado y apoyado relanzamientos de su obra, incluyendo su autobiografía, documentales y canciones emblemáticas con fines benéficos.
También fue la productora e impulsora del documental que realizó Martin Scorsese sobre Harrison, Living in the material world (2011), estrenado en HBO.
Por su parte, Courtney Love, tras la muerte de Kurt Cobain en 1994, heredó los derechos autorales y editoriales de su marido, avaluados en $130 y $115 millones de dólares, respectivamente. Desde entonces, la fundadora de Hole sostuvo diversas batallas legales con los sobrevivientes de Nirvana -en su momento impidió la salida de la última grabación de Cobain, "You know you're right", que finalmente vio la luz-, ya que para cada nueva publicación debe haber acuerdo entre las tres partes.