La década ya despuntaba y la carrera de Francisca Valenzuela prometía. Su álbum debut, Muérdete la lengua(2007), la había posicionado como una cantautora joven con singles de alta rotación radial, como "Dulce". Además, su versión para "El tiempo en las bastillas" fue usada en la segunda temporada de la serie Los 80, lo que le dio mayor exposición. De allí a que, el esperado -y difícil- paso hacia el segundo disco, requería, como no, de buenas canciones.

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"Que sería", uno de los temas más populares de su catálogo surgió en esos días ajetreados entre conciertos, entrevistas y búsqueda de composiciones. Fue una tarde en que la cantante recibió el llamado de su mejor amiga. Ella sonaba abatida, doliente, desconsolada. El amor duele a los veinte años, cuando a veces las palabras no alcanzan para contener la pasión juvenil que se desborda al mínimo recuerdo de aquel que se ha perdido.

"Ella estaba terminando con su pololo -recuerda Francisca Valenzuela en conversación con Culto-. Un día me contó y estaba devastada, obviamente. Debía haber tenido unos veintipocos, pero era una relación importante, y como super seria y todo".

A la cantante le conmovió la situación de su amiga. Aunque por entonces no estaba en pareja, no pudo evitar empatizar con su pena, que se revelaba inmensa y dolorosa. Todo el asunto le pareció como un amargor en el paladar. "Me acuerdo que la conversación fue tan impactante por esta idea de separarse, que después escribí la canción inspirada en ese sentimiento de que se estaba acabando la relación".

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La portada del disco

Buen Soldado

(2011)[/caption]

"Ya no somos como antes, las mañanas no son tibias, y no me haces cariño cuando duermo", escribió. "Y yo busco tu mirada una señal que me muestre que esto no va a cambiar. Porque hay que dolería si tu ya no estuvieras, al despertar".

Era el perfil de un amor perdido. Una balada para la tristeza.

Valenzuela recuerda que impulsada por la historia, casi de inmediato se sentó al piano. Comenzó a golpear las teclas con sus largos dedos, de manera cadenciosa, como el palpitar de un corazón abatido. "Salió de una -recuerda- después solo le cambié como dos líneas de la letra".

"Y que sería un día sin alguien que/Te hiciera buena compañía no quiero saber".

"Pero lo que sí cambió fue la rítmica del piano, que originalmente era como un atresillado mucho más denso -agrega-. Eso después se simplificó y como que se volvió más recto, más soulera, más Erasure, todas esas referencias. Además, también se apuró el tempo, más dance".

El tema, trabajado junto al productor Vicente Sanfuentes, fue el segundo sencillo de Buen soldado(2011), pero antes se había revelado a todo lo ancho de la gran pantalla como parte de la banda sonora de la película Qué pena tu vida. Su videoclip estuvo a cargo de la dupla Christopher Murray e Ignacio Rojas, quienes a principios de la década pusieron imagen a varias composiciones del indie pop chileno, entre los que destacan artistas como Teleradio Donoso, Gepe, Leo Quinteros, entre otros.

https://www.youtube.com/watch?v=9WQHGQR69JI