La presentación de la banda estadounidense Maroon 5 en la noche del 27 de febrero en el Festival de Viña del Mar generó reacciones entre críticos y público general. Una de las ideas que más se repite es que el grupo, en especial su frontman Adam Levine, resultan fomes, faltos de chispa. Una actitud que contrasta con la fibra soul y funk, asociada a su música.
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La idea, en rigor no es del todo nueva. A propósito de la presentación del grupo en el Super Bowl de 2019, el crítico Bryan Rolli escribió para Forbes. "A pesar de todo el escándalo, el drama, las decisiones de último minuto, Maroon 5 demostró ser el espectáculo perfecto de medio tiempo para el Super Bowl de este año, al ofrecer una actuación increíblemente aburrida para un juego increíblemente aburrido".
La pluma del redactor estuvo particularmente cargada a las impresiones negativas. " En aproximadamente 15 minutos, lograron arruinar un meme de SpongeBob Squarepants , mejorar mi opinión sobre el mediocre desempeño de Justin Timberlake en 2018 y hacer que el espectáculo de medio tiempo de Black Eyed Peas en 2011 parezca de buen gusto".
En la breve presentación, de quince minutos, el grupo tocó hits como "This Love", "Sugar", "Harder to Breathe", "Girls Like You" -solo con Levine- y "Moves Like Jagger". Pero aún así, eso no fue garantía para la crítica. "Para ser justos, nadie esperaba razonablemente que Maroon 5 ofrezca un espectáculo innovador de medio tiempo. Muchos artistas han dado actuaciones mediocres en ese escenario antes. Pero esto se sintió diferente -escribió Rolli-. Este fue un karaoke borracho en la boda de tu enamorado de la escuela secundaria. Este fue un baile en línea con todas tus tías y tíos en tu reunión familiar".
